La primera sala nos muestra a los animales de cerca, para conocerlos a través de la visión de estos autores que centran su atención en diferentes aspectos, como la relación del animal en manada o en su hábitat, aunque es el retrato el género predominante.
La segunda sección, en cambio, nos introduce en el horror y la injusticia, en la cruda realidad que motiva la celebración de esta exposición, y así las obras aquí presentadas destacan por su crítica, directa o sarcástica, cruda o velada, a la caza como deporte, el circo, el zoo, el abandono de mascotas en vacaciones o la brutalidad que reciben los animales en las industrias cárnicas.
Finalmente, el tercer bloque se dedica a las soluciones, medios para oponerse al maltrato animal. Asociaciones, colectivos, granjas ecológicas y otras iniciativas que muestran una alternativa para aquellos que toman conciencia de este problema y no desean seguir contribuyendo a su perpetuación.
Por tanto, esta exposición reúne a través del arte en todas sus formas –desde la pintura y la fotografía al vídeo, la ilustración o la escultura– las dos caras de una misma moneda, la fascinación y el respeto de unos, la insensibilidad y la crueldad de otros.
El arte se convierte una vez más en un medio, no un fin, ya que no se trata de una exposición al uso, sino de principios y convicciones, de compromiso y concienciación. Pero, tanto unos como otros, los que maltratan, los combatientes y los impasibles, ¿irán a visitarla y sacarán de ella algo de provecho? El Roto, demoledor como siempre, ya lo dice en una de sus viñetas: ‘Hoy le he visto las orejas al hombre’, la pregunta es ¿hasta cuándo?
Sobre Capital Animal
Capital Animal es una asociación fundada por las periodistas Concha López y Ruth Toledano, el gestor cultural Rafael Doctor, la artista Ruth Montiel y el escritor y músico Alessandro Zara. Transformada en evento cultural se irá desarrollando a lo largo de este año a través de diferentes actividades y en distintas sedes. Toma como punto de acción la capital, Madrid, pero con el objetivo de alcanzar una población más amplia que se sume a su causa, la defensa de los animales frente al hombre y la reivindicación de la justicia que se les ha ido quitando poco a poco hasta convertirlos en una mera fuente de ingresos con la cual lucrarse por encima de todo.
No se trata de una muestra puntual y aislada que podría dar lugar a un paso sin huella en el panorama cultural de Madrid, sino de un variado programa de actividades con el denominador común del empleo del arte como base de la denuncia contra el maltrato. Conferencias, como la que tendrá lugar el 30 de junio a cargo del novelista J.M. Coetzee en el Museo Reina Sofía, conciertos como el del próximo 28 de mayo en el Museo Lázaro Galdiano o las recientes proyecciones cinematográficas en la Cineteca de Matadero Madrid demuestran que el principio de pluralidad, tanto en la concepción de Capital Animal como en el público al que desea llegar, es uno de sus pilares: cuantos más puedan escuchar su mensaje, transmitido en la modalidad artística y en el entorno cultural que sea, mejor.