Entre 1995 y 1996, un suceso conmocionó a Bélgica y a Europa entera, Marc Dutroux secuestró, torturó y abusó sexualmente de seis niñas y adolescentes de 8 a 19 años, de las cuales cuatro fueron asesinadas.
Hace cien años, Igor Stravinski escribió Five Easy Pieces para enseñar a sus hijos a tocar el piano. Con Seven Easy Pieces, Marina Abramovic llevó a cabo algunos de los momentos más icónicos de la historia de la performance. Ahora, Milo Rau junto a CAMPO, Centro de Arte de Gante, ha utilizado la biografía del mayor criminal belga para dibujar una breve historia del país, desde la declaración de independencia del Congo hasta la manifestación de la Marcha Blanca. Y tomarlo como punto de partida para reflexionar sobre la (re)presentación de los sentimientos humanos en el escenario.
Rau ha generado un ambicioso proyecto que involucra a niños de entre 8 y 13 años, donde aborda los límites de lo que saben, sienten y hacen. En palabras del director, «al crear Five Easy Pieces queríamos mostrar algo que la gente no quiere ver de los niños. Una representación teatral infantil arriesgada, sin precedentes y prácticamente imposible».
En la representación, los jóvenes actores adoptan varios roles: un oficial de policía, el padre de Marc Dutroux, una de las víctimas o los padres de una niña muerta. Las cuestiones puramente estéticas y teatrales se mezclan con problemas morales: cómo pueden los niños entender el significado real de la empatía, la pérdida, la edad adulta, la desilusión, la rebelión y la sumisión. Y cómo se reacciona al verlos representando escenas de violencia, amor y romance.
Todo esto conduce a una experiencia conflictiva interior de lucha contra los propios miedos y deseos. Five Easy Pieces es la primera parte de una trilogía de la que Milo Rau acaba de estrenar su segunda parte, Los 120 días de Sodoma, inspirada en la película de Pasolini.
- Jueves y viernes a las 20.30 h.