El supuesto asesinato cometido por Marcos, un estudiante de bachillerato, constituye el punto de partida de una investigación que nos permite adentrarnos, a través de sus amigos y compañeros de clase, en sus miedos, sueños e inquietudes. Escrita para La Joven Compañía por su autor, La edad de la ira ofrece una mirada radicalmente nueva con respecto a la novela original: una función en la que los adolescentes son los únicos protagonistas y que nace como un canto a la diferencia y a la búsqueda –libre y valiente– de nuestra identidad.
Novelista, dramaturgo y doctorado cum laude en Filología, en la trayectoria de Nando López destacan títulos como In(h)armónicos (Premio Joven & Brillante de Narrativa), Las vidas que inventamos, La inmortalidad del cangrejo o La edad de la ira, obra finalista al Premio Nadal 2010. Sus novelas se caracterizan por su crítico retrato de la sociedad contemporánea a partir de argumentos en los que se apuesta por la intriga y el thriller como un mecanismo para guiar al lector a través de la introspección en las emociones de sus personajes. También ha participado en antologías de relatos como Lo que no se dice o El cielo en movimiento y es autor de títulos juveniles con gran éxito entre los lectores adolescentes, como El reino de las Tres Lunas o Los nombres del fuego.
Como dramaturgo, ha estrenado más de una veintena de obras, entre las que destacan: #Malditos16 para el Centro Dramático Nacional (2017), Los amores diversos (2016), Las harpías en Madrid (2016), Pánico, adaptación de la comedia de Mika Myllyaho (2016), De mutuo desacuerdo (2015), una versión de Yerma de Federico García Lorca (2015) dirigida por José Luis Arellano para el Gala Theatre de Washington, Cuando fuimos dos (2012), Saltar sin red (2012) Darwin dice (2012) y Tour de force (2011).
La Joven Compañía cuenta con cerca de cuarenta jóvenes de 18 a 27 años, dirigidos por grandes profesionales del circuito teatral nacional y representa más de 160 funciones al año. En cuatro temporadas, más de 150.000 espectadores de toda España han visto sus producciones.