En 1989, el artista multidisciplinar Bertomeu Ferrando comenzó a dar clases en la Facultad de Bellas Artes de la UPV y durante su primer curso organizó el grupo de performance y poesía en acción Tusílago y un poco de blanco. Una vez desaparecido éste, algunos de sus componentes, junto a otros nuevos, crearon Comedor de ideas, un grupo inicialmente reducido pero que pronto iría agrandándose hasta conformarse como ANCA, que abriría en Torrefiel un local alternativo de exposiciones en febrero de 1990.
A lo largo de sus cinco años de actividad ininterrumpida, ANCA llevó a cabo performances, instalaciones, música aleatoria, exposiciones objetuales, land-art, poesía fonética, publicaciones de poesía visual, edición de vídeos, talleres, conferencias y numerosas colaboraciones con eventos varios. En 1994, la asociación se disolvió, si bien la mayoría de sus participantes siguieron en contacto mientras desarrollaban su actividad artística, unas veces de forma individual y otras de modo colectivo.
En 2017, a raíz de una reflexión en torno a los movimientos artísticos surgidos en Valencia durante aquella fructífera etapa, nace la idea de llevar a cabo la exposición que ahora acoge la UPV. Así lo explican sus miembros: «Aquí estamos nuevamente, dispuestos a concluir nuestro tráfico de cinco años, al soterramiento de una muerte anunciada que el tiempo, siempre insobornable, se ha ocupado de aplazar in saecula saeculorum casi durante 25 años. No hay muerte digna sin un funeral de altura –como escribió el poeta–, y esta es la razón por la cual queremos compartirlo contigo, invitarte a celebrar nuestra asunción al paraíso de la paz eterna, el hogar donde quedan varadas las naves de los que en vida se creyeron artistas. Descanso en paz, en paz, en pie, en piu, en pou y en puu».
El pasado miércoles, durante la inauguración de la muestra se llevaron a cabo 10 acciones (ver galería).