La muestra exhibe 53 obras, de las cuales 33 son originales (cuatro de los fondos del Museo Nacional), además de 20 reproducciones de detalles musivos realizadas por la restauradora Montse Agüero. Se exponen también diversos materiales que intervienen en la técnica y elaboración de este tipo de mosaico.

Organizada por el museo valenciano junto con World Monuments Fund, la exposición se articula en dos partes. La primera explora los lazos del trencadís con los mosaicos antiguos. Gaudí usó en su obra varias tipologías de mosaico características del Modernismo: romano, veneciano, pétreo, cerámico y trencadís. Estas técnicas se diferenciaban de otras de carácter industrial como el gres y el azulejo hidráulico. La segunda parte analiza su evolución siguiendo su presencia en distintas obras del arquitecto, partiendo de la Torre Güell, primera construcción en la que utilizó esta técnica.

Además, la muestra dedica un apartado especial a la tradición musiva en Valencia. El trencadís, muy presente en la capital del Turia, decora edificios tan destacados como la Estación del Norte y reviste un carácter especialmente popular en su uso en las fachadas de viviendas del barrio del Cabanyal.

Seminario Gaudí y el trencadís cerámico. La creatividad del reciclaje. 26 y 27 de octubre.

Deconstrucción

Gaudí experimentó con todo tipo de materiales, en especial la cerámica, sustituyendo el corte regular de la tradicional tesela del mosaico por el fragmento azaroso. A su alrededor brotó todo un equipo de artesanos, industriales y peones –destacando el arquitecto Josep M. Jujol– con quienes compartió creatividad y también su afección por el reciclaje.

De ahí que el mosaico de trencadís sea hoy una de las imágenes que mejor identifican su obra. No hay que olvidar que en el modernismo la arquitectura representa la síntesis de todas las artes y gracias al uso adecuado de la ornamentación se genera una rica combinación de formas, volúmenes, texturas y también de colores –un color que viene dado, sobre todo, por el uso del mosaico de cerámica y vidrio.

Esta exposición quiere explicar el origen y evolución del trencadís que acaba en un proceso de deconstrucción de esta técnica, descubriendo la materia prima a partir de la cual se compone. Así, se presentan piezas originales y réplicas junto a fotografías, de forma que se pueden identificar una gran parte de los materiales empleados.