«Es un mundo muy especial con un atractivo visual innegable», destaca Erhardt. «Muchas de las personas que lo transitan acuden allí en busca de evasión y muchos también lo hacen para dar salida a sus ansias de exhibicionismo, lo que lo convierte en un escenario fantástico».
En sus imágenes, el fotógrafo ha acentuado ese carácter escénico: «He querido generar una atmósfera teatral. Así perseguía revelar la capacidad de la fotografía para crear ficciones, e incluso mentiras, a partir de una realidad supuestamente objetiva, al tiempo que mostrar un rasgo de la fotografía de calle que me fascina: la cualidad aleatoria de esa generación de ficciones. Al pretender una reproducción instantánea y estática de la vida, el azar del momento produce, en muchos casos, resultados inesperados».
La singularidad de los personajes retratados se convierte también en metáfora de la soledad, un tema de especial atracción para Cano Erhardt, «quizá en parte por el empeño en olvidarlo y negarlo que observo en la sociedad». «Creo que estas personas tan especiales, que por otra parte abundan en Coney Island, en el fondo son gente muy solitaria que solo buscan que los demás les miren».
«Erhardt tiene una mirada absolutamente fresca y singular y eso para nosotros tiene un valor muy importante», recuerda Luis Burgos. «Nuestra galería sólo hace una exposición de fotografía al año, pero siempre hemos tenido la vocación de buscar artistas locales en un entorno muy hostil para ellos, porque hay muy pocos espacios que se dedican a la fotografía y, sobre todo, los que lo hacen apuestan cada vez más por traer a artistas de fuera ya consolidados frente a los españoles que son más difíciles de promocionar y de vender. Nuestra idea, un tanto optimista, es que tengan aquí un lugar para exponer su trabajo que les pueda servir de trampolín y donde puedan expresarse con la mayor libertad posible».
La exposición In Coney Island está incluida en el Festival Off de PHotoEspaña 2016 [1].
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Más sobre Erhardt
De formación fundamentalmente autodidacta, el contacto personal y las enseñanzas de fotógrafos y artistas como Isabel Muñoz, Javier Vallhonrat, Shelby Lee Adams o Harvey Stein han contribuido y contribuyen decisivamente a la formación de Cano Erhardt.
Actualmente se concentra en proyectos de paisaje rural y naturaleza, y de fotografía de calle. Para ello reparte sus actividades entre España y Nueva York, aparte de viajes esporádicos a otros lugares del mundo.