De las más de tres mil obras de ilustración que atesora la fundación, 172 pueden etiquetarse de satíricas. Carmen Espinosa, la comisaria de la muestra y conservadora jefe del Museo Lázaro Galdiano, junto aCarlos Sánchez, ayudante de conservación, han sido los encargados de catalogar estos dibujos, un trabajo arduo que les ha llevado un año.
La mayor parte de los dibujos fueron publicados en periódicos, revistas o álbumes de la época y transportan al visitante a los inicios del humor gráfico español. Destaca la aportación de Manuel Luque de Soria, que trabajando en París se empapó de la técnica francesa y acabó por llevarla a España, o el dibujo de los frailes de Francisco Javier Ortego y Vereda, que sentó las bases del prototipo caricaturesco de estos personajes.
La exposición Caricaturas. Ilustradores de los siglos XIX y XX en la Colección Lázaro está formada por una estudiada selección de dibujos satíricos de personajes que estaban de actualidad a finales del siglo XIX y principios del XX. La pretensión no es enciclopédica, ni de trazar una cronología del dibujo humorístico, sino mostrar al público algunas de las más destacadas piezas que posee la Colección Lázaro.
Una ventana al XIX
Tal vez el personaje caricaturizado más reconocible hoy en día sea Emilia Pardo Bazán. La literata ha sido retratada en una impresionante obra que capta su esencia y su presencia. Otros nombres propios que la historia no ha conseguido borrar son los del periodista Sinieso Delgado o el escritor Enrique Gaspar y Rimbau.
Estos tres dibujos están acompañados de otras 23 piezas humorísticas firmadas por 12 artistas, donde los visitantes encontrarán a filósofos, científicos, actores, compositores y políticos de la época. Como curiosidad se expone también una caricatura de José Lázaro Galdiano de autor desconocido.
La exposición se mantendrá abierta al público hasta el 9 de diciembre y la entrada es gratuita.
Todas las caricaturas
De Manuel Luque de Soria (1854-1924) se exhiben caricaturas de El general Jean Thiboudin, Armand Silvestre, Aurelien Scholl, Jules Claretie, Pierre Puvis de Chavannes, Charles François Gounod y Albert Wolff, además de un cuaderno de artista con numerosos bocetos. De Inocencio Medina Vera (1876-1918), Loreto Prado y Enrique Chicote y Crítica situación. De Honoré Daumier (1808-1879), Tout ce qu’on voudra: Quant à moi je tiens surtout à employer…, Souvenirs du Congrés de la Paix: Disciples de Mr. Cobden, Ptsionomie de L’Assemblée: Assaut de la tribune, Actualités: Prestation de sement d’un noveau membre. De Émile Durandeau (1827-1880), Jules Ferry. De Francisco Javier Ortego y Vereda (1833-1881), Monjes conversando. De José Parera y Romero (1830-1902), The selt of England. De Pedro de Rojas (1873-1947), Sinieso Delgado. De Ramón Cilla Pérez (1859-1937), Vital Aza Buylla y Emilio Thuillier. De Tomás Júlio Leal da Câmara (1876-1948), Emilia Pardo Bazán. De Francisco Sancha Lengo (1874-1936), José de Laserna. De Joaquín Santana Bonilla (entre 1899-1931), Eduardo Benot. De Manuel González Martí, «Folchi» (1877-1972), Teodoro Llorente Olivares y Enrique Gaspar y Rimbau. Por último se expone también un dibujo de José Lázaro Galdiano de autor desconocido.