Pampinak Teatro es una compañía que mezcla el teatro negro y el Bunraku (teatro de marionetas japonés) utilizando muñecos que miden desde 80 centímetros hasta cinco metros de altura, armados con sistemas de manipulación propios y generando climas profundamente poéticos en los que los elementos se mueven con una organicidad tal que parecen estar vivos.
El barrendero que quería ser mago
El truco de Olej [1]narra la historia de un niño barrendero que quiere ser mago. Intentará aprender la profesión haciendo enfadar al presentador del circo, mientras se suceden distintos cuadros típicos del espectáculo circense: malabaristas, acróbatas y equilibristas. Una colorida obra con un fuerte impacto estético en el cual los personajes, muñecos de distintos tamaños y colores fluorescentes, se arman y se desarman cobrando vida gracias a la complicidad de la oscuridad.
Protagonizada por Aitor Presa, César Rodríguez, Zoe Sepúlveda, Javier del Arco, Raúl Amores y Ricardo Cristóbal y dirigida por Martín López Romanelli, esta representación de teatro negro permanecerá en el Teatro Bellas Artes (Madrid) del 19 de julio al 11 de agosto.
Orígenes del teatro negro y el Bunraku
El teatro negro nace en Praga, en un escenario totalmente negro iluminado sólo con luz ultravioleta. Los actores, vestidos también de negro, manejan figuras cuyos colores brillan con esta luz y se mimetizan con el fondo desapareciendo de la vista, dando la sensación de que las figuras se mueven solas.
El Bunraku es un arte milenario en Japón. Son muñecos de los que salen varillas de madera para que dos, tres y hasta cinco actores los manejen casi pegados a ellos.