Comisariada por Miguel Clementson, la muestra ha sido posible gracias a la cesión temporal de una parte significativa de los fondos artísticos de Caja Sur y de la Diputación Provincial de Córdoba (unidas en la Fundación Viana), que abarcan una amplia franja cronológica, desde fines del siglo XVI hasta el XXI. A estas se le añaden destacadas aportaciones de la Fundación Provincial de Artes Plásticas Rafael Botí y las procedentes de los más importantes museos de Córdoba y de su provincia.
Entre ellos están el Legado Benítez Mellado, de Bujalance, el Museo Rodríguez Luna, de Montoro, el Museo Lozano Sidro y el Centro de Arte del Paisaje Español Contemporáneo, ambos de Priego, y el Museo Garnelo, de Montilla. En cuanto a las instituciones de la ciudad, aportan importantes obras el Museo de Bellas Artes de Córdoba, el Real Círculo de la Amistad y el Centro de Arte Pepe Espaliú.
El resultado es un paseo representativo por la riqueza del patrimonio artístico de esta ciudad andaluza en una exposición que toma su título, Córdoba luciente, de los versos del poeta del Siglo de Oro Luis de Góngora (Córdoba, 1561-1627).
Desde el Renacimiento
El recorrido expositivo se plantea con una secuencia cronológica que va desde finales del Renacimiento hasta los inicios de las vanguardias, es decir, desde el siglo XVII hasta el XX. Comienza este recorrido en los primeros años del XVII con dos obras representativas de Pantoja de la Cruz y de Jan Brueghel el Joven, que dan entrada al magnífico repertorio correspondiente al Barroco, con pintores tan destacados como Valdés Leal, Luca Giordano o Antonio del Castillo.
Del siglo XVIII se muestran trabajos de Acisclo A. Palomino y de José Ignacio del Cobo y Guzmán, que continúan las fórmulas del barroco tradicional, a las que añade una paleta de mayor riqueza cromática. También está representado Miguel J. Meléndez de Ribera, en cuya obra se manifiestan ya los cambios en el gusto introducidos por la dinastía borbónica.
Como referencia testimonial de la pluralidad de lenguajes artísticos que convivieron durante el siglo XIX, se exhiben composiciones representativas de diversos movimientos: el Neoclasicismo, con el Retrato del escultor Álvarez Cubero de Juan Antonio de Rivera; o el Romanticismo, con el Autorretrato del Duque de Rivas; junto a diversos trabajos de estética correspondiente a los movimientos realista, simbolista y modernista.
Romero Barros y su familia
Ya en el tránsito entre las últimas décadas del siglo XIX y primeras del XX destacan las obras de Tomás Muñoz Lucena, Joaquín Sorolla, Ángel Díaz Huertas, José Garnelo, Adolfo Lozano Sidro y Mateo Inurria, pero adquiere máxima relevancia la presencia de una familia tan determinante para el desarrollo del arte en Córdoba como fue la de Rafael Romero Barros y sus hijos, así como la de los célebres pintores Rafael y, sobre todo, Julio Romero de Torres.
Ya en pleno siglo XX, y dada la enorme diversidad de lenguajes y propuestas artísticas que convivieron en esa centuria, se ha agrupado bajo diversos epígrafes, desde la figuración hasta la abstracción, a autores que, en alguna medida, comparten planteamientos similares.
Por último se dedica una sala a la exhibición de obra gráfica seleccionada de entre la magnífica colección de la Fundación Provincial de Artes Plásticas Rafael Botí. La relación de los 11 autores representados contempla, junto a Roberto Matta, nombres destacados del arte español contemporáneo: Picasso, Joan Miró, Alberto Sánchez, Pablo Palazuelo, Juan Barjola, Antoni Tàpies, Eduardo Chillida, Antonio Saura, Luis Gordillo y Eduardo Arroyo.