Junto a las obras contemporáneas, en la exposición está presente el Apostolado (h. 1590), un importante conjunto del Greco y taller perteneciente al Museo Nacional de Escultura (en depósito en el Museo de Bellas Artes de Asturias). Se hace evidente la metáfora creada entre el carácter clásico de un Apostolado, un grupo de 12 emisarios de la palabra de Dios, y el conjunto de las obras de los 12 artistas presentes que, de alguna forma, elevan su voz para hacernos llegar la del Greco.
Los artistas presentes en la muestra plantean abiertamente su vínculo con el cretense, un reconocimiento que a veces es explícito en sus trayectorias y otras, aunque menos evidente, igualmente intenso.
José Manuel Broto, Jorge Galindo, Pierre Gonnord, Luis Gordillo, Secundino Hernández, Cristina Iglesias, Carlos León, Din Matamoro, Marina Núñez, Pablo Reinoso, Montserrat Soto y Darío Villalba son los creadores que están Entre el cielo y la tierra. Además se cuenta con la colaboración de Joan Fontcuberta.
Intensa influencia
Como señala la comisaria de esta muestra, Isabel Durán, «hay muy pocos artistas clásicos que hayan influido de forma tan intensa en el arte producido en las últimas décadas. La presencia del proyecto artístico del Greco es clara. Probablemente sean él, Diego Velázquez y Francisco de Goya los que permanecen con un aliento más intenso en lo que llamamos arte contemporáneo».
El catálogo contiene intervenciones textuales de 12 expertos tanto en el Greco como en el arte contemporáneo. Todos ellos presentan ensayos breves en torno a lo que supone la impronta del griego en la historia y en el arte desde nuestra mirada contemporánea.
Posteriormente, la muestra viajará a la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando (Madrid), donde se podrá visitar entre septiembre y noviembre.
Esta exposición se enmarca en el programa «Nuevas Miradas» de la Subdirección General de Promoción de las Bellas Artes del Ministerio de Educación, Cultura y Deporte. Bajo el prisma de la creatividad contemporánea, este programa busca una nueva lectura de las colecciones históricas de los museos, fomentando el diálogo entre los fondos, los espacios y el arte más actual.