Suárez Londoño observa una personalísima metodología que pasa por una minuciosidad extrema, “casi obsesiva”, como puntualiza Yara Sonseca, comisaria de la exposición. Baste señalar para ilustrar esta característica, que el artista dedica cada día de la semana, y de forma inalterable, a una actividad. Por ejemplo, todos los martes, y sólo los martes, dibuja las planchas que los miércoles, todos los miércoles, imprimirá en el taller de grabación. Otro dato concluyente acerca de este metódico sentido es que desde 1992 se autorretrata durante los primeros 12 días de enero y vuelve a hacerlo cada primero de mes durante el resto del año.
Ese afán compilatorio y clasificatorio marca su obra y, por ende, la exposición de Madrid, cuyo título, Muestrario, incluye obras realizadas en distintas técnicas y formatos que traslucen las fuentes del autor: su entorno cotidiano, la delicada observancia de la naturaleza, la literatura y la historia del arte, con una dedicación muy especial al arte marginal.
Múltiples referencias
En la obra de Suárez Londoño se encuentran y se cruzan referencias a escritores, artistas, creadores populares, canciones, noticias, frasesmde la calle, etc. Buena parte de su trabajo ha sido realizado en pequeñas libretas de dibujo que poco a poco han ido tomando el carácter de diario íntimo.
Precisamente ese carácter de diario y de obra privada, sumado a la voluntad de Suárez Londoño de permanecer hermético, ha hecho difícil el conocimiento de su trabajo, si bien sus dibujos han circulado y han sido reconocidos ampliamente en eventos nacionales e internacionales, como la 57 edición de la Bienal de Venecia, en 2013, o en el Drawing Centre New York, en 2012.
Desde el principio
En este recorrido por la totalidad de su obra, la exposición incluye algunos de sus primeros dibujos como estudiante de arte, los Cuadernos suizos, realizados durante sus años de formación en Ginebra, entre 1978 y 1984, donde se observa el germen de su simbología y los primeros intentos el autor por hallar la composición perfecta. Estas primeras obras se complementan con los dibujos agrupados bajo el título Colección Pizano, nacidos del empeño propio por vivir la academia sin haber pasado estrictamente por ella, «por lo que se enseñó a sí mismo copiando a los clásicos».
Muestrario incluye sus Cuadernos de viaje a modo de crónicas. Prolongando tal esfuerzo, la exposición presenta también sus Calendarios, en los que dibuja cada día a partir de las azarosas citas de un almanaque. La serie 365, que realizó entre los años 1994 y 1995, durante 365 días, a dibujo por día, sentó el precedente para sus Cuadernos anuales, estos últimos vinculados a sus lecturas, que van desde Brian Eno a Rimbaud pasando por W.G. Sebald o Rainer Maria Rilke.
En otro apartado se presentan sus Sellitos, una gliptoteca particular de camafeos o matrices de piedra muisca convertidos por Suárez Londoño en minúsculas gomas de borrar, el material que mejor se corresponde con su oficio de dibujante.
La exposición se completa con una selección de sus grabados, al aguafuerte, que demuestran su dominio técnico y su disciplina metodológica y más de cien dibujos sueltos, exquisitos en su individualidad y en su concentración simbólica.
Como apostilla Yara Sonseca a la hora de justificar el interés de este Muestrario: «Cualquier elección será buena porque todas sus obras se contienen en una. En todas se halla lo que mejor define el trabajo de Suárez Londoño: la factura impecable, el registro de lo cotidiano y su capacidad para generar una iconografía propia. Un misterio trinitario en el que se encuentran lo aprendido, lo cotidiano y lo imaginado».
José Antonio Suárez Londoño dibuja desde la infancia. Entre 1974 y 1977 estudia Biología en la Universidad de Antioquia y en 1984 concluye sus estudios en L’Ecole Superieure d’Art Visuel de Ginebra. Desde entonces vive y trabaja en Medellín. Ha expuesto en la Bienal de Venecia (2013), en el MoMA, Nueva York (2010), y en el MNCARS, Madrid (2000), entre otros. Él mismo elabora y estampa toda su obra gráfica en el taller de grabado La Estampa de Medellín.
Actividades paralelas
El sábado 21 de febrero se desarrollará el taller Fabricando sellos con gomas de borrar en el que el artista colombiano compartirá su proceso creativo con quien esté interesado en ello a partir de los Sellitos, esa particular colección de camafeos o matrices de piedra muisca convertidos por Suárez Londoño en gomas de borrar.
El 14 de marzo tendrá lugar el taller En torno a las exposiciones, una visita activa a la exposición donde los participantes tendrán la oportunidad de acercarse y reflexionar sobre su particular universo y a sus distintas técnicas y se trabajará sobre la importancia del dibujo como medio de expresión.