Prostitución, adulterio, heterosexualidad, homosexualidad… ¿Era la vida sexual de los antiguos romanos muy diferente de la nuestra? Tanto las historias divinas como las humanas están llenas de aventuras amorosas, estrategias de seducción, pasiones, transgresiones, engaños y desengaños. Las pinturas y los objetos hablan de desinhibición y desenfreno, pero también había tabúes y doble moral.
Hasta nuestros días
La vida sexual de aquella época es muy conocida gracias a los testimonios que han llegado a nuestros días, ya sean textos, representaciones visuales o piezas de diferentes tipos que se conservan integradas a la arquitectura y, sobre todo, en los museos.
Así, son famosos los llamados gabinetes secretos de algunos museos, como el de Nápoles, que reúnen obras muy explícitas, a menudo verdaderamente pornográficas, que aportan mucha información sobre las prácticas sexuales en la antigua Roma.
También en Cataluña se conservan piezas relacionadas con el mundo del sexo a la época romana. Se trata tanto de representaciones artísticas, de objetos de tipo religioso o con finalidad ritual, como de elementos utilitarios de la vida cotidiana; tanto de piezas del ámbito público como de la intimidad doméstica.
Cinco grandes ámbitos
La muestra se divide en cinco grandes ámbitos. El primero, ‘Sexo y matrimonio’, está dedicado a las relaciones entre hombres y mujeres, su evolución a través del tiempo y la posición de corrientes filosóficas como el epicureísmo y el estoicismo frente a las relaciones sexuales y el matrimonio.
El segundo, ‘Sexo, seducción y belleza’ habla de la atracción física y de los recursos que se podían utilizar para seducir a la persona deseada. El tercero, ‘Prácticas sexuales’, describe las diversas formas de disfrutar del sexo documentadas a la sociedad romana, y la consideración que se tenía de ellas. Seguidamente, el visitante se traslada del mundo de los hombres al mundo de los dioses. Y es que la sexualidad divina servía como pretexto para justificar la vida sexual de los humanos. Júpiter, Venus, Cupido, Hermafroditos, Príapo y Baco tenían sus estrategias de seducción, sus aventuras, y sus engaños y desengaños.
Finalmente, la exposición se traslada a ‘Las prácticas sexuales fuera del matrimonio’, incidiendo en las múltiples relaciones que se podían entablar fuera de la pareja legalmente establecida, ya fuera con personas del mismo género, con personas que cobraban para practicar el sexo o incluso con animales.
A lo largo de la muestra, el visitante se encontrará acompañado en todo momento de los autores clásicos. Los consejos de Ovidio, de Séneca, de Plauto o de Suetonio sirven para contextualizar las piezas que se exponen: objetos de tipo religioso o con finalidad ritual, elementos de la vida cotidiana, piezas del ámbito público y de la intimidad doméstica.
La exposición llega a Tarragona precedida de un gran éxito de visitantes al Museo de Badalona, donde fue presentada por primera vez esta pasada primavera. En el futuro visitará los museos miembros de la Arqueoxarxa [1]: Museo de Gavà, Museo de la Noguera, MAC Empúries, Museo y poblado de Can Oliver, Museo Comarcal del Urgell, Museo Arqueológico Comarcal de Banyoles, Museo Salvador Vilaseca de Reus, MAC-Barcelona, MAC-Girona. Y también el Museo de Granollers y el de Mataró.