Ferran Adrià. Auditando el proceso creativo, que puede verse de manera gratuita en el Espacio Fundación Telefónica hasta el 8 de marzo de 2015, es una inmersión en el universo creativo de Adrià (Hospitalet de Llobregat, 1962) y su equipo. Pero no se trata de una exposición de cocina, es un recorrido por el proceso creativo exitoso de elBulli. Un éxito que radica en la renovación constante, basada en parámetros de innovación y creatividad, características que le han convertido en un referente no sólo en el ámbito gastronómico.
Tres años después de cerrar elBulli, Adrià desvela su proceso creativo y las claves del éxito del restaurante de Cala Montjoi. Casi mil metros cuadrados dedicados a la reflexión y a la interpretación del modelo de elBulli que buscan sorprender al visitante e invitarle a crear y definir su propio ADN creativo. Como el mismo Adrià asegura, «me gustaría que la población de este país mimetizara la gastronomía y que la excelencia que se ha conseguido en ella se exportara a otras disciplinas».
La muestra incluye desde grandes murales a centenares de dibujos realizados por el mismo Adrià, pasando por objetos y herramientas de elBulli, hasta una recreación del comedor y de la misma cocina donde se elaboraron los 1.846 platos de la historia de este restaurante único. A todo ello se suman proyecciones audiovisuales inmersivas y animaciones que ayudan a diseccionar e interpretar este universo y que adentran al visitante en la mente del equipo de Adrià y un formato expositivo con instalaciones artísticas que son un guiño a las estructuras reticulares de su amigo Richard Hamilton, que no faltó ni un año a la cita gastronómica en Cala Montjoi.
La revolución de elBulli
Para entender esta transformación en la trayectoria profesional de Adrià hay que remontarse a 1987, cuando durante un stage culinario en la Costa Azul, el chef francés Jacques Maximin le recordó que “la creatividad es no copiar”. Esta frase fue el inicio de un cambio revolucionario. Adrià dejó atrás los recetarios e inició su propia andadura, que cambió la manera de entender y degustar la cocina. Desde entonces empezó a cuestionarse los límites. ¿Por qué un helado no puede ser caliente? ¿Quién dice que no pueden mezclarse dulce y salado? De aquí la imagen que se ha elegido para representar esta exposición, un dibujo hecho por él mismo con la transcripción a mano de la palabra WHY?
Durante 25 años, de 1987 a 2011, el equipo del restaurante de Cala Montjoi trabajó con el fin de evolucionar el lenguaje de la cocina y encontrar un estilo propio, siempre con la exigencia de ser lo más disruptivos posible. ElBulli creó una partida dedicada exclusivamente a la creatividad. Estaba la partida de la carne, el pescado, los entrantes, los postres y… la creatividad. En esos años, elBulli invertía el 20% de su presupuesto en I+D.
Con el cierre en 2011, esta tarea continuó a través de elBullifoundation [1] («aunque no nos hemos ido ya hemos vuelto», destaca el cocinero). Adrià y su equipo -que han invertido ocho millones de euros en la Fundación- se han dedicado a investigar y continuar experimentando sobre su propia disciplina. Han sistematizado una “fórmula de la creatividad” que aspira a que sirva de modelo para otras disciplinas y de autoanálisis para encontrar el método de cada uno. Aseguran que no se trata de un modelo único, pero sí de uno válido para quien quiera mejorar el rendimiento y la eficacia de su empresa, negocio u oficio.
La guía de la exposición
Con el objetivo de facilitar la comprensión de su universo, Adrià ha dibujado un mapa del proceso creativo que representa el plano de la muestra, y que se va desvelando a través de los diferentes espacios expositivos. Este mapa animado, sujeto a constante evolución, es el resultado de un permanente trabajo de análisis realizado por el equipo de Adrià en el que se representan los elementos que, desde su punto de vista, configuran el ADN del proceso.
Así pues, el visitante irá descubriendo, paso a paso, las variables que elBulli considera relevantes en su proceso para lograr la longevidad creativa. A través de una brújula y de unas citas que acompañan cada una de los espacios, el visitante descubrirá las piezas que componen el puzle del proceso.
Estas pueden agruparse en bloques que corresponden a cada una de las secciones del mapa: ElBulli, historia de un sueño; Personalidad creativa y recursos; El ravioli que se va; ¿Qué es una técnica creativa?; Miles de anotaciones y decenas de libretas: Archivo, registro y documentación; Del Big Bang a hoy: el Análisis evolutivo y la Auditoría Creativa.
Más de un año, más de cien personas
Un equipo multidisciplinar ha estado más de un año trabajando para recrear este universo creativo, bajo la coordinación del mismo Adrià y de un equipo de Fundación Telefónica, coordinado por Almudena Bermejo y María Brancós. Desde los mapas creados por José Aguirre y Andrés Ortiz de Bestiario, empresa especializada en visualización de datos; el diseño expositivo de Olga Subirós; una campaña creativa de los publicistas Toni Segarra y Jorge Martínez y una web espectacular [2] realizada por Mario Tascón (Prodigioso Volcán) [3] con textos de la periodista Mar Abad de Yorokobu. La web invita, además de a descubrir la exposición, a mostrar todo lo que envuelve los procesos creativos en general, con información adicional como entrevistas y retos culinarios a través de redes sociales.