En la persona de Velasco se reúnen dos facetas: la de actor y presentador del programa Pinceladas (Vegavisión TV Cantabria), dedicado a difundir la cultura y el arte a pie de calle, y la de pintor expresionista de oficio y muchos recursos, menos conocida de lo que sin duda merece.
En esta muestra ofrece su vertiente más matérica, utilizando pastas de sílices y mármol con pigmentos y aglutinantes acrílicos aplicados con maestría sobre el lienzo. Una pequeña lección para conseguir esa inmediatez que a ojos extraños parece tan sencilla, abstrayendo elementos del paisaje, retazos de costa o campos, mares de arena salpicando el horizonte.
Pareciera que Velasco todo lo hace sin esfuerzo, por propia naturaleza imbuida en la mente y la memoria. Un conocimiento que convierte el trazo en ideograma. Conocimiento del saber tocar sólo lo necesario y de, también, saber parar, a veces tan difícil en la pintura. El cántabro dedica más tiempo a la reflexión previa y al esfuerzo de preparar la materia para pintar con un único toque, alla prima, como si de la antigua técnica del temple se tratara.
Formatos más bien pequeños, adecuados al espacio ajustado de la Galería, que en un espacio limpio y recogido respiran con su propia cadencia. Sin duda, una atractiva inmersión en el mundo de Guido G. Velasco.
