La exposición refleja el principal interés artístico del autor: el individuo. En este sentido, sus retratos constituyen un registro del mundo contemporáneo, una instantánea del mundo actual que abarca una extensa galería de destacados personajes nacionales e internacionales.
Para la comisaria de la muestra, Lola Jiménez-Blanco, su obra está definida por la contemporaneidad. Sus personajes están pintados en una atmósfera actual dominada por el espacio vacío y por el contraste de la horizontalidad y verticalidad de sus formas. El pintor parte del estudio detenido de la personalidad del retratado, acercándolo a la abstracción en su concepción espacial. La presencia del espacio vacío en su obra es una manera de renovar el retrato pictórico, así como la idea de estructura ortogonal, por influencia de los espacios urbanos y naturales de su Cádiz natal.
En la muestra se pueden contemplar, por ejemplo, el retrato de Dámaso Alonso (1984) que le dio a conocer en el ámbito nacional, junto con el tríptico Carlos Solís (1983). También los retratos de importantes personalidades de la generación del 27, como Rafael Alberti (1983) o personajes de su entorno, como Carmen Bustamante (1984-1985). Y retratos de personajes de la esfera social, política y cultural de las últimas décadas, como los de Severo Ochoa (1992), Josefina Gómez Mendoza (1994-1995), Jesús de Polanco (1998), Felipe González (2000-2005), Gregorio Marañón (2005) o Norman Foster (2015).
– La muestra Cortés. Retrato y estructura viajará a finales de octubre a la Fundación Unicaja de Cádiz.
Retratos parlamentarios
Cortés cultiva el retrato desde la década de los años ochenta: Alberti, Guillén o Dámaso Alonso son obras fundamentales de sus comienzos. Junto a ellos destacan personajes de su entorno, como Carlos Solís o Carmen Bustamante. En ellos la geometría se hace compatible con el reto principal del retrato: el del parecido. También la geometría se hace visible en la concepción espacial de sus obras: unas veces mediante la inclusión de una línea de horizonte, otras mediante sillones de diseño contemporáneo que los acerca al mundo de hoy. A comienzos del siglo XXI recibe dos encargos del Senado y del Congreso de los Diputados. Fruto de ellos son dos series que se han convertido en imagen inseparable de la vida parlamentaria española.