Pandur murió súbitamente sobre un escenario en Skopie (Macedonia) el 12 de abril de 2016, mientras ensayaba El rey Lear de Shakespeare. El director y dramaturgo tenía una gran vinculación afectiva y artística con la capital española, «ha estado muchas veces aquí y trabajando con actores y actrices, creando escuela. Su discurso y su propuesta estética han sido muy importantes en Madrid. Desde su primer montaje, Infierno, en el CDN, este director ha estado buscando un lenguaje propio que expresara el mundo del que nos quería hablar y, a pesar de que al principio no fue entendido del todo, él siguió fiel a su búsqueda», recuerda Portaceli.
Así lo afirmaban las palabras del propio Pandur, «en Madrid he encontrado una nueva fuente para mi creatividad y mi inspiración, un nuevo hogar sacado de mis sueños». Para rendir tributo al esloveno se llevarán a escena dos obras, ambas en esloveno con sobretítulos en español, además de una exposición de fotografías de Alojsa Rebolj sobre diferentes montajes dirigidos el artista, en la Plaza de Santa Ana hasta el 12 de febrero.
Un lugar en el universo
[1]El último proyecto teatral de Pandur fue Fausto (del 2 al 5 de febrero). Basado en la obra suprema de Goethe, su gran poema dramático en dos partes, la obra se centra en los fragmentos en los que la historia del desarrollo de la leyenda y su expansión a esferas morales y filosóficas más amplias representa también una historia intelectual de la humanidad. Aunque se basa en la leyenda medieval de un hombre que vendió su alma al diablo, el tema se lleva a la actualidad narrando el sentido de alienación del hombre moderno y su necesidad de llegar a un acuerdo consigo mismo y con el mundo que le rodea.
A lo largo de los últimos siglos, esta historia ha madurado hasta convertirse en un mito arquetípico de las aspiraciones del hombre y los dilemas con los que se enfrenta cuando intenta comprender su lugar en el universo. Con su adaptación de la leyenda de Fausto al clima intelectual y emocional de nuestra propia época, Pandur representa un proceso alquímico, en el que todo lo que entra en el espacio escénico se transforma, y de este modo construye su propio lenguaje escénico.
En medio de la lucha eterna contra un mal omnipresente, Pandur pone en escena el eterno deseo por lo que no poseemos: familia, amor, juventud o belleza. Al entrar en el campo de lo mágico a Fausto se le permite experimentar la realización total, aunque sea por un instante, incluidos el amor, la autoridad y el poder, pero el contrato con Mefistófeles (o consigo mismo) firmado con sangre, le lleva de nuevo, finalmente, a su propia soledad y a la transitoriedad de la vida. La adaptación de Livija Pandur será interpretada por Igor Samobor, Branko Šturbej, Barbara Cerar, Polona Juh, Branko Jordan, Uroš Fürst, Klemen Janežič, Urban Kuntarič, Žan Perko y Mario Dragojević.
- De jueves a sábado a las 20.00 h. / Domingo, 19.00 h.
La soledad de la pérdida
Del 10 al 12 de febrero llegará el turno de Inmaculata, con Nataša Matjašec Rošker como protagonista. Durante dos mil años se ha estado produciendo la biografía de María, pintada y escrita miles de veces, y aun así cada uno de los paisajes de su historia lleva el mismo tema central: el de la mujer que ha perdido a su hijo. Es infinita la soledad de la pérdida, la crónica de la pérdida sigue inexplicada, su viaje es un viaje al límite, donde cada pensamiento se convierte en el filo del cuchillo y la herida nunca cicatriza.
En las grietas de este texto, en su espacio mental, intuimos capas que han sobrevivido al tiempo y representan una pre-memoria ontológica, mientras su verdad sigue siendo un enigma. Queda malentendida, sola, diferente, divina y mortal, pero se ha convertido en heroína, icono, ídolo. Una de esas mujeres que inspiran constantemente el arte.
En palabras de Livija Pandur, que dirige la obra, «la confesión de María, su imaginación, su amor incondicional, su soledad, su duda, su miedo y su coraje en la búsqueda de la verdad a nivel emotivo, sociopolítico, religioso y mítico, desvela una corriente mental polifacética de la percepción y recepción del tiempo actual, de los gestos irracionales e imágenes arquetípicas pintadas por la civilización actual».
- Viernes y sábado a las 20.00 h. / Domingo a las 19.00 h.