Conde propone un diálogo con el tiempo y con el espacio, un ejercicio discursivo sobre la transformación arquitectónica y la memoria construido sobre la fisicalidad y los nuevos usos de la Antigua Fábrica de Tabacos de Madrid, un impresionante edificio construido durante el reinado de Carlos III.
Las ruinas de este proyecto son los vestigios arquitectónicos de instalaciones industriales que ya no existen: una fábrica, un matadero, una central eléctrica, una estación del ferrocarril, una factoría automotriz, un mercado, una torre de agua. Infinitos representantes de una organización social y un modelo productivo conocidos pero hoy obsoletos, superados en la función, el tiempo y el espacio.
Esta exposición, organizada por la Subdirección General de Museos Estatales del Ministerio de Cultura y Deporte, es el fruto de la investigación y exploración directa por parte de Conde de 120 instituciones muy diversas de Europa occidental realizadas durante una década, con el objetivo de recuperar y proyectar hacia el futuro la memoria de estos edificios y la identidad de sus territorios primigenios.