La curiosidad y el ansia de conocimiento y aprendizaje por su entorno marcaron la vida y la extensa obra de uno de los autores más prolíficos, populares e influyentes de la literatura universal. En sus novelas creó un imaginario de gran verosimilitud gracias a su interés por la ciencia y a su avidez por documentar todo lo que narraba en sus ellas. Sus obras recogieron el espíritu de su tiempo, cartografiaron el mundo conocido y abrieron las puertas a espacios hasta entonces apenas intuidos.
Verne está en el origen de la curiosidad, la aventura, el descubrimiento y el conocimiento de muchos lectores que, al llegar a la edad adulta, quisieron acometer lo que el autor imaginó. Dijo el escritor que “cada cual vive en el mundo que es capaz de imaginar”. Justamente él imaginó un sinfín de mundos fantásticos sin moverse apenas de su propio gabinete de trabajo, un espacio limitado pero infinito para su creatividad.
Consiguió generar un imaginario verosímil gracias a su profundo interés por la ciencia, la exploración y las innovaciones tecnológicas. Sus novelas, perfectamente documentadas, abrieron las puertas de otros mundos fantásticos.
Comisariada por María Santoyo y Miguel Ángel Delgado, la exposición propone una revisión del mítico autor a través de un fascinante viaje por sus personajes y sus invenciones, por el mundo que le rodeó y, sobre todo, por el mundo que inspiró. Así, se disecciona el universo literario verniano y traslada a la realidad las hazañas y aventuras de sus obras a través de veintisiete personajes históricos, que se atrevieron a llevarlas a cabo y fueron pioneros en sus disciplinas a mediados del siglo XIX y comienzos del XX.
Personajes como el archiduque Luis Salvador de Austria, que se instaló en las Baleares y se convirtió en el guía literario de Verne por Palma de Mallorca en la novela Clovis Dardentor, o los primeros exploradores españoles en África, Manuel Iradier y Julio Cervera Baviera, o las hazañas de la periodista Nellie Bly, primera mujer en dar la vuelta al mundo en 72 días, etc. Estas son algunas de las historias de personajes que acometieron lo que el autor francés aventuró, a veces de modo visionario, en sus novelas.
A partir de una treintena de sus obras más representativas y de los distintos ámbitos en que transcurren sus novelas: la tierra, el aire, el hielo, el agua y el espacio, el visitante recorrerá de la mano de contemporáneos españoles y extranjeros el imaginario plausible de Verne.
La muestra se articula en torno a dos grandes áreas: El gabinete de Verne y Los territorios vernianos. En la primera se recibe al visitante con un videomapping de Julio Verne y actúa como distribuidor de los contenidos de la exposición, ordenándolos conceptual y físicamente.
En esta sección destacan varias joyas bibliográficas como la primera edición mundial de Veinte mil leguas de viaje submarino (1869), que por circunstancias históricas fue española. El visitante descubrirá también una serie de ilustraciones de sus personajes, desde Phileas Fogg hasta el capitán Hatteras, así como inventos e ingenios presentes en sus novelas.
Por último, una instalación audiovisual descubre el bestiario que aparece a lo largo de su vasta creación literaria. La segunda parte contiene seis grupos temáticos en los que articula la exposición: La tierra conocida y desconocida, Trotamundos, Mobilis in Mobili, Desiertos de hielo, Flotar o volar y Alrededor de la Luna.
Actividades complementarias
Julio Verne. Los límites de la imaginación se completa con la programación de Educa Niemeyer, el área de educación del Centro. Los alumnos de educación infantil, primaria, secundaria y bachillerato podrán realizar sendos recorridos didácticos adaptados a sus edades. La oferta también cuenta con seis talleres en familia dirigidos a niños menores de ocho años acompañados por un adulto.