Partiendo de la noción actual de sororidad, la muestra focaliza grupos de artistas, mecenas y galeristas que, pese al sistema patriarcal, compartieron valores y condiciones socioculturales y teóricas favorables. La conjunción de periodos históricos, géneros y temas es el eje principal sobre el que se vertebra el proyecto de De la Villa, evidenciando cómo estas artistas abordaron cuestiones candentes en su época, tomaron posición y aportaron nuevas iconografías y miradas alternativas.
Maestras es una exposición de autoras mujeres que representan a mujeres y sus intereses. Artistas que fueron en su época académicas, reclamadas por mecenas y coleccionistas, partícipes en asociaciones de artistas mujeres, receptoras de los más altos reconocimientos y protagonistas de grandes exposiciones. Mujeres cultas, curiosas, viajeras, cosmopolitas, comprometidas…En ocasiones contaron también con el respaldo y apoyo de sus maestros, compañeros, maridos, hermanos o marchantes.
Como explica su comisaria, Maestras «reúne ocho relatos, desde finales del siglo XVI hasta los años treinta del siglo XX. Cada apartado aborda cuestiones importantes para la historia de las mujeres durante la modernidad y se destacan los hitos de una historia de las ideas en femenino, estudiados en tiempos y lugares muy determinados, que las artistas llegaron a plasmar con la polisemia característica de las artes plásticas. Sus imágenes no son meras ilustraciones de las cuestiones tratadas. Son también demostraciones de cómo las artistas se involucraron con estas ideas y causas».
1. Sororidad I. La causa delle donne. Versión italiana de la querelle des femmes, el título de este primer capítulo remite al debate literario y académico que tuvo lugar en Europa, desde finales del siglo XIV y hasta la Revolución Francesa, en defensa de la capacidad intelectual y el derecho de las mujeres al acceso al conocimiento y la política frente a la misoginia. Este debate se muestra a través de la producción de algunas artistas del norte de Italia, desde finales del siglo XVI y buena parte del XVII, inscritas en botteghe familiares y beneficiadas por un clima sociopolítico y teorías del arte favorables para las mujeres en los Estados Pontificios.
2. Botánicas, conocedoras de maravillas. La revolución científica fue el inicio del ocaso de la tradición del conocimiento botánico, biológico y médico de las mujeres, con la persecución de las brujas como telón de fondo. En este apartado se indaga en el papel de las artistas en el surgimiento y esplendor del género de la naturaleza muerta y una posible genealogía femenina en torno al subgénero del bodegón con insectos, fruto de una concepción ecológica no mecanicista a cargo de artistas-científicas.
3. Ilustradas y académicas. La Ilustración fue la época de las salonnières –anfitrionas, mecenas y participantes del debate cultural– y su compañerismo con intelectuales y artistas. Además, el mecenazgo de María Antonieta y las Mesdames tuvo una gran influencia para el reconocimiento, incluso académico, del valor de la producción artística femenina, que se centró en el género del retrato, tanto en pintura como escultura, en pintura de género y en escenas neoclásicas, mostrando una pluralidad de roles femeninos de intenso acento teatral.
4. Orientalismo/ Costumbrismo. Durante la segunda mitad del siglo XIX, en pleno periodo colonial, los estilos orientalista y costumbrista alcanzaron una gran popularidad y fueron muchos los artistas atraídos tanto por lo lejano y exótico como por lo autóctono y lo rural. En esta sección se pone en valor la contribución de artistas mujeres al orientalismo y al costumbrismo mostrando cómo, frente al punto de vista masculino, patriarcal, e incluso del voyeur colonial, ellas aportaron experiencias de proximidad con otras mujeres no occidentales, dotando de dignidad a los temas y sujetos representados.
5. Trabajos, cuidados. Excluidas de las Academias, en París, mujeres procedentes de toda Europa y América estudiaban en escuelas privadas segregadas y, con el telón de fondo de las reivindicaciones feministas, fundan las primeras asociaciones de artistas mujeres y el Pabellón de la Mujer en la Exposición Colombina Mundial de Chicago, en 1893. En este capítulo se reúnen ejemplos del realismo y del idealismo romántico y político de las artistas, con sus representaciones de mujeres trabajadoras, tanto en tareas tradicionales como en diversos oficios y profesiones, abarcando el periodo de 1860 a las primeras décadas del siglo XX.
6. Nuevas maternidades. Este tema ha sido uno de los más representados en la historia del arte. Sin embargo, no será hasta el final del siglo XIX cuando las artistas comiencen a plasmar los sentimientos de las mujeres acerca de su propia maternidad, al margen y frente al discurso patriarcal del «ángel del hogar».
7. Sororidad II. Complicidades. A partir de la familiaridad de las artistas con compañeros del entorno impresionista, en las últimas décadas del siglo XIX y principios del XX abundan las representaciones de amigas en dúos, tríos o grupos en situaciones de complicidad, de estudio o de ocio compartidos. Son espacios y momentos en común en los que no pasa nada, pero precisamente ahí radica su interés, ofreciendo múltiples variaciones de una iconografía inédita: la amistad entre mujeres.
8. Emancipadas. Entre 1900 y 1937, mientras se consigue el sufragio femenino, las artistas más avanzadas del momento continúan abordando iconografías que subrayan la complicidad entre mujeres y sus aportaciones distintivas en los nuevos lenguajes vanguardistas. Fueron muchas las que participaron activamente en los movimientos de vanguardia, artistas reconocidas que triunfaron en vida y que fueron modelo de fuerza, compromiso, vitalidad, creatividad e independencia, pero que, tras su muerte o a raíz de acontecimientos como la Segunda Guerra Mundial o, en el caso de España, la dictadura, serían eliminadas de la historia y de los museos.
Redefinición feminista
Maestras es la primera gran muestra enmarcada en el proceso de redefinición feminista que el Thyssen está realizando en los últimos años.
La exposición ha sido organizada en colaboración con el Arp Museum Bahnhof Rolandseck [1] (Remagen, Alemania), adonde viajará en una versión reducida tras su paso por Madrid (del 25 de febrero al 16 de junio de 2024).