Noguera ha desarrollado trabajos sobre los procesos conceptuales de la fotografía y la electrografía, siendo en la década de 1970 uno de los pioneros de la creación de obras artísticas partiendo de fotocopias. También ha profundizado en el concepto de archivo como ready-made, a partir de fotografías y filmes encontrados que exponen una manera de entender la imagen fotográfica y su proceso.
Intuición e ironía acompañan una dilatada y minuciosa reflexión en torno a las propiedades y límites de la materia, de lo cotidiano, del lugar, de la naturaleza… La muestra presenta una serie de imágenes-dibujo inéditas relacionadas con el lenguaje y la lectura, tema que es una constante en su obra desde los años 1968-1969. Es a partir de entonces cuando comienza a incorporar la escritura en sus piezas, idea que concibe al empezar a trabajar con monotipos en papel periódico.
Esa obsesión con la palabra escrita y con las letras le lleva entre los años 1969-70 a incorporar en sus piezas de cerámica palabras inconexas y descontextualizadas, y posteriormente, en 1971, a trabajar con poesías visuales, yuxtaponiendo a imágenes palabras y frases.
A partir de 1974 será cuando cree la serie de dibujos y cartones que se presentan en esta exposición, utilizando para ello el alfabeto y los números, en ocasiones de forma ordenada y racional, y en otras de forma mecánica y al azar.
La elaboración se produce a partir de tampones, sellos de goma, madera y hierro, todos ellos encontrados. Tampón, brocha-pincel y tintas de imprimir que ayudan a desarrollar el resultado en la composición y el formato de las piezas. De este modo, Noguera crea un mundo de escritura lleno de poesía y, sobre todo, de amor a la palabra escrita como fuente de inspiración artística.