En ese panorama de éxito de la imagen urbana en la Europa de la Edad Moderna, las ‘exóticas’ ciudades españolas fueron revisitadas incansablemente, creando un repertorio de vistas urbanas basado en la mirada del otro: el viajero, el editor o el dibujante extranjero. Hasta el 23 de junio, el Museo de Bellas Artes de Asturias ofrece ahora un recorrido visual por distintas ciudades cuyas vistas y monumentos fueron captados por artistas de los siglos XVI, XVII, XVIII y XIX.
La exposición Imago Urbis. Las ciudades españolas vistas por los viajeros (siglos XVI-XIX) reúne más de un centenar de obras (entre libros ilustrados, estampas, acuarelas, dibujos y óleos), entre las que están los pioneros repertorios de vistas de ciudades en el Renacimiento y el Barroco (Braun, Münster, Lavanha, Colmenar, Texeira), para pasar después a los tiempos de la Ilustración (Villanueva, Ponz, Laborde, Bradford, Murphy, Brambrila) y a la nostálgica mirada de los viajeros románticos (Locker, Lewis, Roberts, Gail, Vivian, Girault de Prangey, Pérez Villaamil, Doré).
Fotografía y globos
Finalmente, la aparición de la fotografía (Clifford) y los primeros viajes en globo (Guesdon), junto a la expansión industrial burguesa, transformarán la percepción de la ciudad tradicional, completando este viaje visual y literario por la iconografía urbana, un género artístico aún fragmentariamente conocido y que permite –como pocos– pasear por los paisajes históricos.
Dentro de esta selección se ha contado con el fondo de libros ilustrados de viajes que conserva el Museo así como de otros procedentes de la Biblioteca de la Universidad de Oviedo, la Biblioteca de Asturias “Ramón Pérez de Ayala”, la colección de obra gráfica de la Universidad de Cantabria, la Biblioteca Menéndez Pelayo, el Archivo Lafuente, así como varias colecciones particulares.
La muestra, organizada por el Museo de Bellas Artes de Asturias y el proyecto de investigación del Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades (FEDER/UE) “Culturas urbanas en la España Moderna” (universidades de Cantabria y Oviedo), ha sido comisariada por los catedráticos de Historia del Arte Luis Sazatornil y Vidal de la Madrid.