En una edición en la que han participado 80.408 imágenes realizadas por 5.034 fotógrafos de 125 países diferentes, de las que se han seleccionado 143 instantáneas, continúa estando presente la crisis migratoria, a la que se suman los conflictos políticos, la movilidad humana o la influencia de la tecnología en la conectividad, así como el impacto del ser humano en el medio ambiente.
Entre las seleccionadas está la ganadora de este año. Realizada por Burhan Ozbilici, la fotografía muestra a Mevlüt Mert Altıntaş, un policía turco de 22 años, instantes después de asesinar al embajador de Rusia en Turquía, Andrey Karlov, en una exposición de arte en Ankara el pasado 19 de diciembre.
A través de esta exposición, la fotografía se convierte en herramienta de sensibilización social. Y por este motivo se amplía hacia una programación de actividades paralelas y la realización de visitas guiadas, talleres, clases magistrales para profesionales y proyecciones.
Representación española
Entre los ganadores se encuentran tres fotógrafos españoles. Francis Pérez se hizo con el primer premio en la categoría Naturaleza con la fotografía Caretta caretta atrapada, que muestra una tortuga marina en la costa de Tenerife enredada en una red de pesca.
En la misma categoría, Jaime Rojo consiguió el tercer premio con Monarcas en la nieve, una imagen que enseña decenas de mariposas yaciendo sin vida en Michoacán, México, tras ser golpeadas por una tormenta.
Por su parte, Santi Palacios se alzó con el segundo premio en la categoría Temas de actualidad con la fotografía Abandonados, la imagen de una niña nigeriana de 11 años que llora junto a su hermano de 10 la muerte de su madre a bordo del bote de salvamento de una ONG, en julio de 2016. Los niños habían navegado durante horas en un bote neumático sobrecargado con otros refugiados y fueron rescatados en el Mediterráneo, a unos 23 kilómetros al norte de Sabratha, Libia.
Además, en la categoría Temas contemporáneos también destaca el tercer premio de un fotógrafo afincado en Barcelona, el alemán Daniel Etter, con la imagen La trampa libia para los migrantes, en la que dos refugiadas nigerianas lloran y se abrazan en un centro de detención para refugiados en Surman, Libia, en agosto de 2016.