Esta exposición permite profundizar en su proceso creativo a través de obras de grandes dimensiones y series de numerosos elementos, como Canons o Zettel, que desarrolló a lo largo de varios años, así como otras que se muestran al público por primera vez, como Ying-Yang (1980), Diatheke (1988-1991) o E70 KV589 (1980),
Interesada también en los fundamentos de la semiótica, Asins estudió con Max Bense en la Universität Stuttgart y con Noam Chomsky en la Columbia University. A lo largo de su carrera empleó múltiples formatos y medios (desde la poesía concreta al vídeo, pasando por el dibujo, la escultura o la instalación), caracterizados siempre por el rigor compositivo y la depuración formal en la ejecución.
Método
«Mi trabajo se basa en un sistema de relaciones, el método con el que yo trabajo es precisamente el estructuralismo. La estructura es algo interno, es un orden de relaciones, es una relación de las partes con el todo, son ritmos, es una concatenación de situaciones, de lugares, de espacios y de tiempos».
«Mi obra es siempre una proposición lógica cuya esencia radica en la distribución y ordenación de objetos espaciales. Esta recíproca posición espacial de los unos con los otros y de unos hacia otros expresa así relaciones y esencias, de modo que en cualquier desarrollo o variación se entiende, que la complejidad viene debida de una determinada relación».
(Elena Asins)
La obra de Elena Asins ha sido expuesta en más de 40 países y se encuentra presente en museos y colecciones privadas y públicas de todo el mundo. En 2006 recibió la Medalla de Oro al Mérito en las Bellas Artes, en 2011 recibió el Premio Nacional de Artes Plásticas y en 2012 recibió el Premio Arte y Mecenazgo. En 2011 el Museo Reina Sofía le dedicó la retrospectiva Fragmentos de la memoria.
La investigación de Asins estuvo determinada por su temprana experiencia en 1968 en el Centro de Cálculo de Madrid, donde formó parte del seminario Generación Automática de Formas Plásticas. Es en este entorno donde comenzó a explorar las bases matemáticas del arte y las posibilidades de las nuevas tecnologías.
El arte cibernético en España tuvo su origen en este seminario. Durante estos años, la artista participó en otros círculos experimentales como la Cooperativa de Producción Artística y Artesana —proyecto iniciado por Ignacio Gómez de Liaño— y se rodeó de un entorno abierto a la conversación y el cruce entre diversas disciplinas: artes plásticas, las matemáticas, la poesía, la lingüística, la filosofía, la música o la arquitectura.
En los ochenta, durante su estancia en Columbia, Asins realizó sus primeras obras enteramente con ordenador. Desde entonces el uso de la calculadora electrónica acompañó la conceptualización y producción de su trabajo. Su paso por esta universidad dio origen a una serie de obras en las que estudia la estructura del plano mediante formas progresivas y generativas partiendo del concepto de escala.
Entre los años 1987 y 1990 residió y trabajó en Hamburgo, donde continuó su producción con formas generadas por ordenador y realizó dibujos en papel continuo con la ayuda de impresora. De corte conceptual, estas series estaban inspiradas en motivos que van desde el Antiguo y el Nuevo Testamento hasta el filósofo Ludwig Wittgenstein. Series como Zettel y sus múltiples variaciones —que se pueden encontrar en este muestra— aluden directamente a Wittgenstein y reflexionan espacialmente sobre construcciones matemáticas que se asumen como perfectas y sólidas.
En la década de 1990 continuó trabajando con ordenadores y reactivó antiguas fórmulas matemáticas, llegando a incorporar un sistema nuevo. Fue en estos años cuando, en recuerdo a J.S. Bach, empezó a denominar Canons a los átomos o partes mínimas de la obra. En 1990 volvió a España y comenzó sus investigaciones en torno al Canons 22.
La música y el ritmo fueron una fuente de inspiración constante en su obra, presente en todas sus épocas. En la serie Canons parte visualmente de una melodía y desarrolla imitaciones, repitiendo obsesiva y minuciosamente elementos con leves variaciones.