L’isola disabitata fue compuesta por García sobre un texto homónimo de Pietro Metastasio. La obra permanecía olvidada hasta que hace un lustro el director de escena Emilio Sagi volviera a darle vida en una coproducción entre el Teatro Arriaga de Bilbao, del que Sagi es director artístico, y el Teatro de la Maestranza de Sevilla. Ese mismo montaje se presenta ahora en los Teatros del Canal.
Compuesta para cuatro voces y piano, el maestro vizcaíno Rubén Fernández Aguirre será quien asuma la dirección musical y la interpretación instrumental de la partitura. Los papeles estarán cantados por la soprano Berna Perles, la mezzo Marifé Nogales, el tenor Jorge Franco y el barítono César San Martín. La escenografía es obra de Daniel Bianco, y el vestuario lleva la firma de Pepa Ojanguren.
Sevillano universal
Manuel García fue compositor, productor de ópera, director de escena, afamado maestro de canto y un magnífico cantante, considerado en su época como uno de los más brillantes tenores de la historia de la lírica. Gioachino Rossini escribió para él los papeles principales de El barbero de Sevilla y de Otello, ossia Il moro di Venezia. García fue, además, padre y maestro de dos de las más grandes divas del XIX: María Malibrán y Pauline Viardot-García.
El argumento de L’isola disabitata relata la historia de Gernando, de su esposa Constanza y de Silvia, la hermana pequeña de ésta, que acaban refugiándose en una isla desierta huyendo de una amenazadora tormenta. Allí unos piratas secuestran a Gernando.