El escritor Ramon Reventós (1882-1923), vinculado al círculo barcelonés de Els Quatre Gats, fue colaborador de la revista modernista Luz y de publicaciones satíricas de corte republicano como Papitu, Picarol (que dirigió brevemente) o L’Esquella de la Torratxa. A través del artista Ángel Fernández de Soto (1882-1938), Reventós conoció a Picasso, con quien tuvo una estrecha relación.
Su amistad llevó al escritor a escribir uno de los primeros artículos publicados sobre el pintor, Notas sobre Picasso, que se publicó en el periódico La Vanguardia en 1898. Asimismo, en las tertulias que la familia Reventós organizaba en su residencia barcelonesa, Picasso tuvo oportunidad de conocer a artistas e intelectuales de la época como Santiago Rusiñol, Isidre Nonell, Miquel Utrillo o Pablo Gargallo.
Libro ilustrado
Esta relación se extendió en el tiempo hasta la muerte de Reventós en 1923. Fue entonces cuando Picasso, gran admirador de su estilo literario, intentó que su obra no cayera en el olvido.Cuando, ya exiliado en París, el artista conoció al editor Ferran Canyameres, le propuso publicar la obra de su amigo ilustrada por él. Fruto de esta idea nació la publicación Dos contes. El centaure Picador y El capvespre d’un faune, un libro para el que, en febrero de 1947, el pintor realizó cuatro grabados al buril, que se muestran en la exposición.
Estos cuatro grabados, titulados respectivamente El naixement del centaure (El nacimiento del centauro), Els oficis del centaure: picador, cavall de tir, mestre d’escola (Los oficios del centauro: picador, caballo de tiro, maestro de escuela), Faune flautista (Fauno flautista) y Episodis de la vida del faune (Episodios de la vida del fauno), inciden de manera conjunta en una temática recurrente en la trayectoria del artista: la mitología grecorromana y los temas mediterráneos.
Las cuatro obras proceden de la colección de la Fundación Picasso. Casa Natal de Málaga.