Organizado por la Comunidad de Madrid en el marco del Festival de Otoño a Primavera y en los actos del cuarto centenario [2], el concierto reconstruirá escenográficamente un oficio de difuntos de la manera en la que se realizaba a principios del siglo XVII, gracias al musicólogo Juan Carlos Asensio. La misa contará con la característica alternancia de partes polifónicas y canto llano, este último procedente de los cantorales de El Escorial de principios del siglo XVII.
Y se completa con los responsorios de los maitines del oficio de difuntos, que en la época se cantaban durante las absoluciones, y el impresionante salmo De profundis, que los clérigos recitaban o salmodiaban mientras se procedía en procesión a la depositio o sepultura del difunto. Algunos de los responsorios incluidos pertenecen a otro de los contemporáneos de Cervantes, el zaragozano Pedro Ruimonte (1565-1627), que se destacó por ser el maestro de capilla del gobernador de los Países Bajos, el archiduque Alberto. Sus obras luctuosas (en el Missae sex) fueron publicadas en Amberes en el año 1614.
Se recreará la atmósfera luctuosa de las exequias de la Corona que se celebraban, precisamente, en la Iglesia de San Jerónimo el Real. En cierto modo, el concierto tratará, 400 años más tarde, de celebrar el funeral de Estado que mereció el genio alcalaíno, pero que sus contemporáneos no le dieron. Este año, además, La Grande Chapelle ofrecerá este mismo concierto en la inauguración del prestigioso Festival Internacional Cervantino de Guanajuato (México).
Este Réquiem para Cervantes fue grabado por La Grande Chapelle en 2005 (LAU 002), dando como resultado un documento sonoro de primera importancia, que recuperaba algunas de las obras más destacadas del patrimonio musical de principios del siglo XVII y las enmarcaba en su contexto litúrgico original y que en 2016 ha sido reeditado por la Comunidad de Madrid.
Homenaje a Mateo Romero
No sólo se rinde tributo al genio de la literatura española sino también a otras figuras destacadas del arte y la cultura del Siglo de Oro. Mateo Romero (1575-1647), maestro de la Real Capilla bajo los reinados de Felipe III y Felipe IV, fue el principal compositor de la Corte española hacia 1616, fecha de la muerte de Cervantes.
El llamado “Maestro Capitán” destacó en la escritura polifónica a dos coros (stile moderno), tan en boga en los principales centros musicales de Europa y muy particularmente en la Basílica de San Marcos de Venecia. El Réquiem a dos coros constituye una de las mejores obras de Romero, de gran solemnidad y una factura vocal impecable.