Arts and Crafts impulsó un amplio resurgir de las artes y los oficios, en el ámbito profesional y en el doméstico, defendiendo un estilo de vida sencillo y cercano a la naturaleza. Las cuestiones que planteó acerca de la sostenibilidad de la producción industrial, la relación entre el trabajo y la vida, la honestidad de los materiales, la belleza de los objetos cotidianos y la protección los edificios antiguos y del medio ambiente siguen plenamente vigentes en la actualidad. Como el propio Morris afirmó en The Beauty of Life [La belleza de la vida], su célebre conferencia de 1880: “No tengas nada en tu casa que no sepas que es útil o que no consideres bello”.
William Morris y compañía está organizada en cuatro secciones cronológicas y temáticas, con 300 importantes piezas de mobiliario, textiles, papeles pintados, joyas, vidrio, cerámica, metalistería, encuadernaciones, pintura, dibujo, grabado y fotografía.
La gran mayoría de las obras provienen de instituciones británicas y no han sido antes expuestas en España. Entre ellas destaca un inmenso tapiz realizado por Morris & Co en la década de 1890 que ilustra la leyenda del Santo Grial, el exquisito armario de Ernest Gimson pintado con imágenes de la vida rural en los Cotswolds, un bello panel bordado por Margaret Macdonald Mackintosh, o la gran vidriera de Frank Lloyd Wright.
Figura clave
William Morris (1834-1896) es una de las figuras más relevantes de las artes, las letras y la cultura británica de finales del siglo XIX. En vida fue conocido sobre todo como escritor, poeta, diseñador y fundador de la compañía Morris, Marshall, Faulkner & Co. –a partir de 1875, Morris & Co.–, dedicada a las artes decorativas y a la decoración de interiores. Y también por ser el fundador y líder indiscutible del movimiento que hoy en día conocemos por el nombre, simple y compuesto a la vez, de Arts and Crafts –las artes y los oficios artesanales.
El movimiento surgió en torno a 1880 y se convirtió en la corriente dominante en la artesanía y el diseño británicos hasta aproximadamente 1914, aunque su influencia persistió en algunas zonas hasta bien entrado el siglo XX. Su ideario, basado en las ideas de Morris acerca del proceso de trabajo, el diseño y la vida en general, no tardó en traspasar las fronteras de Gran Bretaña, extendiéndose por Europa, Estados Unidos y el resto del mundo.
En su momento álgido, entre 1890 y 1910, fue considerado como la corriente estética más influyente y de mayor alcance surgida en Gran Bretaña en la era moderna. Una nueva generación de arquitectos, diseñadores, artistas y artesanos –entre los que destacan Charles Robert Ashbee, Mackay Hugh Baillie Scott, Ernest Willliam Gimson, William Richard Lethaby y Charles F. A. Voysey– compartieron su fe en el trabajo colaborativo y el compañerismo, además de una visión moral de la vida.