La misma noche de la jornada de clausura el pasado domingo, técnicos especializados han desmontado Mural (1943), la obra que Pollock realizó por encargo de Peggy Guggenheim y que supuso un punto de inflexión en su carrera ya que, además de suponerle el reconocimiento dentro del mundo artístico, entrañó una evolución desde la figuración pictórica hacia el expresionismo abstracto, considerado hoy como el primer movimiento genuinamente estadounidense del siglo XX.
Tras su exposición en la Peggy Guggenheim Collection de Venecia, en la Deutsche Bank Kunsthalle de Berlín y en el Museo Picasso Málaga, continúa su periplo europeo en la exposición Abstract Expressionism de la Royal Academy of Arts de Londres.
El Museo ultima la inauguración el próximo mes de octubre de su nueva exposición, Joaquín Torres-García: un moderno en la Arcadia, el artista uruguayo que, al igual que Picasso, tuvo la valentía de experimentar constantemente y dejó tras de sí una inmensa producción artística en gran variedad de técnicas.