Estas muestras forman parte de nuestro especial 15 exposiciones extraordinarias junto al mar. ¿Quieres ver el resto de recomendaciones? [1]
Obra del arquitecto y Premio Pritzker Renzo Piano (su primer proyecto en España) en colaboración con Luis Vidal Arquitectos [2], el Centro Botín es un lugar único para el arte, la cultura y la actividad formativa, concebido para continuar y potenciar la labor desarrollada por la Fundación en el ámbito de las artes plásticas desde 1984 y en el ámbito educativo desde 1972.
“Desde el primer momento -destaca Piano- entendimos que el edificio habría de estar suspendido en el aire, por encima del suelo y del mar, para formar parte de Santander y su bahía y, a la vez, respetar y potenciar las vistas de la ciudad al mar”. Para el arquitecto italiano de 79 años, el edificio dialoga con la ciudad y con la bahía, pero, sobre todo, «es un lugar para la gente, para que se relacione, interactúe y comparta cosas».
La Fundación Botín, que preside desde 2014 Javier Botín, comenzó hace seis años este proyecto concebido como un centro de arte privado de referencia en Europa cuyo objetivo es generar desarrollo aprovechando el potencial que tienen las artes para despertar la creatividad. Para el presidente de la Fundación, este Centro constituye la «mejor manera de responder a la misión para la que la Fundación Botín fue creada en 1964 por Carmen Yllera y Marcelino Sanz de Sautuola: promover el desarrollo social de Cantabria».
Fátima Sánchez, su directora ejecutiva, destaca la misión social del Centro y el papel fundamental que el arte juega en el desarrollo personal: «El arte forma parte de nuestra esencia y tiene la capacidad de emocionarnos y generar estados de ánimo que nos permiten mirar a la realidad de formas diversas, permitiéndonos ser más abiertos, más conscientes, y más capaces de afrontar retos y resolver problemas de forma más creativa».
Lugar privilegiado
Con una superficie construida total de 10.285 metros cuadrados, el edificio está ubicado en un enclave privilegiado de Santander. Situado en voladizo sobre el mar, está revestido por una piel de cerámica compuesta por 270.000 piezas circulares que reflejan la luz y los colores cambiantes del mar y del cielo.
Articulado en dos volúmenes, el oeste dedicado al arte y el este a las actividades culturales y formativas, el edificio cuenta con dos amplias salas de exposiciones (2.500 metros cuadrados en su conjunto), un auditorio para 300 personas, aulas formativas, área de trabajo, una taberna marinera llamada “El Muelle”, dirigida por el cocinero con dos estrellas Michelin Jesús Sánchez, una tienda y una azotea que ofrece una nueva mirada a la ciudad y a la bahía.
Situado en los históricos Jardines de Pereda, estos han sido completamente remodelados por el paisajista Fernando Caruncho en colaboración con Renzo Piano. Los jardines han doblado su extensión y triplicado las zonas verdes hasta llegar al mar, en un proyecto arquitectónico y paisajístico en el que tan importante es el propio edificio como los espacios públicos creados a su alrededor, las plazas al norte y al oeste del edificio, siendo esta última un anfiteatro al aire libre para actividades culturales.
El Centro continuará y potenciará el programa de Artes Plásticas de la Fundación Botín, que se desarrolla en torno a tres ejes: Formación a través de becas y talleres internacionales dirigidos por artistas; investigación del dibujo de los grandes maestros españoles de todas las épocas; y divulgación por medio de exposiciones internacionales producidas por la propia Fundación fruto de sus programas de investigación (Eduardo Rosales, Bartolomé Esteban Murillo, José de Madrazo o José Gutiérrez Solana, entre otros) y formación (Joan Jonas, Julie Mehretu, Carlos Garaicoa y Tacita Dean son buen ejemplo de ello).
Además, la colección de arte de la Fundación es fiel reflejo de su programa de artes plásticas, que tiene una trayectoria de más de treinta años. Especializada en arte contemporáneo, cuenta con obras realizadas en una gran variedad de medios: pintura, escultura, dibujo, fotografía, vídeo e instalación, etc. El director artístico del Centro es Benjamin Weil, que se incorporó al equipo de la Fundación en 2014.
La Comisión Asesora de Artes Plásticas de la Fundación Botín es la encargada de desarrollar el programa expositivo, y lo hace bajo la dirección de su presidente y exdirector de la Tate Modern, Vicente Todolí. También forman parte de esta comisión Paloma Botín, Udo Kittelmann, Manuela Mena, María José Salazar y Benjamin Weil.
Por último hay que destacar la obra que Cristina Iglesias, Premio Nacional de Artes Plásticas en 1999, ha diseñado para el entorno del Centro Botín y los Jardines de Pereda. Realizada con piedra, acero y agua, Desde lo subterráneo es una intervención escultórica compuesta por cuatro pozos y un estanque, simulando –como ella misma dice– las algas que podrían existir “en un posible jardín submarino, rebosando hacia la superficie”. La artista, representada a partir de ahora en la colección de arte de la Fundación, dirigirá en un futuro próximo un Taller de Artes Plásticas y contará con una exposición en el Centro.
Programa expositivo
Carsten Höller (24 de junio – 10 de septiembre de 2017). Comisariada por Vicente Todolí y Udo Kittlemann, Y es la primera exposición monográfica del artista realizada en España e incluye 14 obras entre las que se encuentran algunos de sus trabajos más reconocidos junto a otros de reciente creación creados específicamente para su exhibición en Santander.
Famoso por sus vertiginosos toboganes y sus lúdicas instalaciones interactivas, la selección incluye incluye piezas tan icónicas como Y (2003) o Elevator Bed (2010), en la que los visitantes podrán pasar la noche en el Centro Botín, o High Psychotank (2015), una obra que les permitirá sumergirse y flotar en un gran tanque.
Más allá de esta exposición, Carsten Höller (Bruselas, 1961) cuenta ya con una obra lumínica en los Jardines de Pereda. Inaugurada a finales de 2014, 7.8 Hz es una instalación realizada específicamente para este espacio que consiste en la modificación de las farolas que iluminan los Jardines transformándolas en una frecuencia de luz parpadeante durante tres minutos cada hora desde el anochecer.
Además está previsto que Höller dirija a un grupo de 15 jóvenes artistas internacionales el próximo mes de septiembre en el Taller de Artes Plásticas de Villa Iris, una iniciativa que desde 1994 organiza la Fundación y por la que ya han pasado otros directores de la talla de Juan Uslé, Gabriel Orozco, Julião Sarmento, Miroslaw Balka, Antoni Muntadas, Jannis Kounellis, Mona Hatoum, Paul Graham, Tacita Dean, Carlos Garaicoa o Joan Jonas, entre otros.
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Dibujos de Francisco de Goya (24 de junio – 24 de septiembre de 2017). La labor de la Fundación en el ámbito de la investigación de los dibujos de los grandes maestros españoles desde el siglo XVII hasta la actualidad quedará reflejada en una exposición de 80 dibujos de Francisco de Goya. Considerados “el diario visual del propio Goya”, los dibujos del artista ponen de manifiesto su universo interior y expresan su peculiar visión del mundo a modo de diario visual.
Seleccionados de los fondos del Prado, y siendo representativos de los distintos periodos de la actividad artística de Goya, Ligereza y atrevimiento. Dibujos de Goya es la exposición más relevante dedicada hasta la fecha a los dibujos del artista en España. La muestra ha sido comisariada por José Manuel Matilla, jefe del Departamento de Dibujos y Estampas en el Prado, y Manuela Mena, jefa del Área de Conservación de Pintura del siglo XVIII y Goya en el citado museo y miembro de la Comisión Asesora de Artes Plásticas de la Fundación Botín.
Además, la Fundación Botín publicará este año el primer volumen del Catálogo Razonado de los Dibujos de Goya, un ambicioso proyecto desarrollado en colaboración con el Prado que incluirá cinco volúmenes, estando previsto que el último de ellos vea la luz en 2019.
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Colección de la Fundación Botín (24 de junio – 1 de enero de 2018). La colección también tiene su espacio en el Centro Botín, que se inaugura con la exposición Arte en el cambio de siglo: una selección de obras adquiridas en la última década, que incluye piezas de aquellos artistas que han dirigido alguno de los Talleres de Artes Plásticas en los últimos veinte años, así como de los beneficiarios de las Becas de Artes Plásticas de la Fundación Botín. Entre ellos se cuentan Lara Almarcegui, Miroslav Balka, Carlos Bunga, Tacita Dean, Carlos Garaicoa, Mona Hatoum, Antoni Muntadas y Juan Uslé. En este sentido, a lo largo del año la colección de arte de la Fundación estará presente a través de distintas presentaciones.
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Julie Mehretu (11 de octubre 2017 – 28 de enero de 2018). Además de las exposiciones con las que inaugura, el Centro acogerá en otoño una retrospectiva de Mehretu comisariada por Vicente Todolì y Suzanne Cotter, directora del Museu de Arte Contemporânea Serralves (Oporto) y entidad con la que la Fundación Botín ha coproducido la exposición. Julie Mehretu. Historia universal de todo y nada es la individual más importante dedicada hasta la fecha en Europa a la artista, considerada internacionalmente una de las pintoras más destacadas de su generación y que ya dirigió en 2015 uno de los Talleres de Artes Plásticas de Villa Iris.
Desde sus dibujos y pinturas más tempranas, realizadas en diversas técnicas como grafito, tinta o acrílico, hasta sus majestuosos lienzos a gran escala, de complejas superficies y arquitecturas, en los que la línea y el gesto adquieren cada vez mayor profundidad y solidez, la exposición estará compuesta por 30 pinturas y más de 40 dibujos realizados en los últimos veinte años. Una selección de obras efectuada en estrecha colaboración con la artista y provenientes tanto de su colección privada como de otras colecciones públicas y privadas de Europa y Estados Unidos.
Cultura y formación
La misión del Centro Botín es despertar la actitud y la capacidad creadora de las personas para que quieran y puedan mejorar su vida y su entorno. Para ello, su objetivo es facilitar el acceso y la convivencia con las artes a todos los públicos, utilizando su enorme potencial para desarrollar su inteligencia emocional y su creatividad. Así, mientras el volumen oeste del Centro está dedicado al arte, el volumen este lo hace a las actividades culturales y formativas, una labor que la Fundación desarrolla desde los años ochenta.
La investigación desarrollada entre la Fundación y el Centro de Inteligencia Emocional de la Universidad de Yale constituye el eje principal del programa formativo del Centro, compuesto por actividades para niños, jóvenes, familias y adultos que despiertan su curiosidad, imaginación y creatividad y les incitan al juego y al aprendizaje a través de la experiencia con las artes. Exposiciones, conciertos, teatro, danza, ciclos de cine, talleres y cursos forman parte de este programa.