Organizada por Borusan Contemporary y comisionada por Kathle Forde, la muestra fue inaugurada el pasado mes de mayo y ha sido una de las atracciones culturales de la capital más valoradas del pasado verano.
Lozano-Hemmer incorpora formas críticas y poéticas con el objetivo de sensibilizar al público y lanzarle preguntas que le hagan reflexionar desde un marcado componente tecnológico. Las obras expuestas mezclan lo lúdico con lo crítico y el goce estético y en ellas cobra gran importancia la interactividad, puesto que todas las piezas se activan con la intervención del visitante.