Durante 60 horas ininterrumpidas, el Palais de Tokyo se convertirá en el centro mundial de las artes plásticas y performativas gracias a la programación propuesta por los distintos centros, referentes del arte contemporáneo en la escena internacional.
El Palais contactó el pasado mes de septiembre con Matadero Madrid para solicitarle una propuesta general de las principales producciones del centro madrileño, que deseaban incluir en el programa de performances, instalaciones, conciertos y conferencias de Do Disturb. Su directora, Carlota Álvarez Basso, y la responsable de la programación artística, Manuela Villa, propusieron 22 de los proyectos más brillantes y al mismo tiempo desafiantes que el centro de creación contemporánea ha desarrollado desde 2009 hasta hoy.
Obras seleccionadas
El director del Palais de Tokyo, Jean de Loisy, seleccionó finalmente una nómina de seis artistas fuertemente enraizados en la escena madrileña: Cristina Lucas con la nueva creación específica para el festival bajo el título Empathy workout table (2014) y su otra pieza La liberté raisonné (2009); David Crespo con la performance Campo de acción (2012); Fernando Sánchez Castillo con la instalación Síndrome de Guernica (2011); Los Torreznos, dúo compuesto por Jaime Vallaure y Rafael Lamata, con las performances Las posiciones (2012), 35 minutos (2002), El desierto (2009) y La cultura (2007); Marco Godoycon el vídeo Claiming the Echo (2012), y Maya Watanabe con la videoinstalación Escenarios (2014).
En total, tres performances con el público como actor principal, tres videoproyecciones y una instalación multimedia.
Ampliar horizontes
Enfocado principalmente al apoyo a la creación y la comunidad artística local, con la que Matadero Madrid ha trabajado estrechamente durante estos años, el programa del centro madrileño se presenta ahora en la escena internacional, ayudando así a la consecución de uno de sus objetivos: ampliar los públicos de los creadores locales y promocionar y dar visibilidad a su trabajo fuera de nuestras fronteras.
En noviembre de 2015, el intercambio se fortalecerá con la presencia de programación, todavía por definir, del Palais de Tokyo en Matadero.