Antes, en julio del mismo año, se habían realizado reuniones preparatorias, pero la del 3 de agosto de hace 300 años fue la primera registrada documentalmente por un secretario de la RAE.
La RAE se creó en 1713 por iniciativa de Juan Manuel Fernández Pacheco, marqués de Villena, quien fue también su primer director. El 3 de octubre de 1714 quedó aprobada oficialmente su constitución mediante una real cédula del rey Felipe V.
Su propósito fue el de «fijar las voces y vocablos de la lengua castellana en su mayor propiedad, elegancia y pureza». En 1715, después de considerar una serie de propuestas para decidir su lema, la institución eligió el aún vigente: un crisol en el fuego con la leyenda ‘Limpia, fija y da esplendor’.
Por el buen uso
Desde entonces, la RAE contribuye -mediante sus actividades, obras y publicaciones- a velar por el buen uso de una lengua en permanente evolución y expansión, patrimonio común de 500 millones de hispanohablantes.
La RAE conmemorará su tricentenario con un programa que se inicia oficialmente el 26 de septiembre. Ese día se inaugurará una gran exposición en la Biblioteca Nacional de España: La lengua y la palabra. Trescientos años de historia de la Real Academia Española, cuyos comisarios son los académicos Carmen Iglesias y José Manuel Sánchez Ron.
Los actos concluirán con una nueva edición -la vigesimotercera- del Diccionario de la lengua española y con la celebración de un simposio internacional sobre ‘El futuro de los diccionarios en la era digital’.
Claves de una exposición
Organizada por Acción Cultural Española (AC/E) y la propia RAE, La lengua y la palabra. Trescientos años de historia de la Real Academia Española analizará los tres siglos de la institución a través de casi trescientas piezas de diferentes épocas, entre pinturas, retratos, grabados, joyas bibliográficas y tesoros incunables, documentales gráficos, periódicos, etc. Una buena parte de ellas no han sido expuestas nunca antes. En palabras de sus responsables «no será una simple muestra de objetos, sino un relato, una historia sobre la historia».
La lengua y la palabra estará dirigida a públicos de todas las edades y condiciones pues, como apunta el director de la RAE, José Manuel Blecua, «la historia de la lengua y de las instituciones que la representan es también la historia de sus hablantes. Los hechos lingüísticos se encuadran también entre las formas de vida y de cultura de todos los ciudadanos».
Siempre liberal
Estructurada en varios apartados, La lengua y la palabra recreará una atmósfera visual, auditiva, emocional e intelectual, de manera, explica Carmen Iglesias, «que el visitante se sienta inmerso en cada uno de los períodos de una historia española común, desde el siglo ilustrado, el XVIII, hasta este XXI en el que nos encontramos. A través de la trayectoria interna y externa de la institución se podrá constatar que lejos de ser una torre de marfil, entrar en los 300 años de la RAE permite comprobar que ha sido y sigue siendo profundamente humana y muy sensible y comprometida con lo que sucede en la sociedad. Con independencia de regímenes y situaciones políticas, esta casa siempre se ha caracterizado por su liberalismo. Así se verá en la exposición».
Por su parte, José Manuel Sánchez Ron insiste en la idea de que se pretende aunar el rigor científico con una representación bella, amena y sorpresiva, donde la tradición y las últimas tecnologías se interrelacionen para contar una historia que tiene a la palabra, a la lengua, al habla, como eje vertebrador de esta aventura que dura ya tres siglos.