Además marcó un hito con Forma 212 (1957), primera obra abstracta que se ubicó en un espacio público de la ciudad condal y primera de una larga lista de intervenciones públicas, como Les Taules de la Llei (1960), realizada en la fachada de la Facultad de Derecho de la Universitat de Barcelona (UB) con Antoni Cumella; Evocación Marinera (1960), en el barrio de la Barceloneta, Monument a Narcís Monturiol (1963) y Monument a Ramon Llull (1976) en Montserrat.
Es especialmente relevante el conjunto de 13 figuras, cuatro puertas de bronce y varios elementos decorativos, realizado para el santuario de la Virgen del Camino de León, obra que culmina la etapa expresionista del escultor y que se considera un hito en la escultura española del siglo XX.
Desde los 14 años
Subirachs empezó a trabajar con 14 años en el taller de un dorador aficionado a la escultura y más tarde, de 1942 a 1947, fue aprendiz del escultor Enric Monjo. También le influyó notablemente, aunque solo pudo trabajar con él unos meses, el escultor ‘noucentista’ Enric Casanovas. Dos años después fundó el grupo Postlectura junto a los escultores Francesc Torres Monsó y Martí Sabé, y los pintores Esther Boix, Ricard Creus y Joaquim Datzira.
Con una beca para ampliar estudios viajó a París y con posterioridad a Bélgica, invitado por el pintor Luc Peire, que descubrió sus obras en el Saló d’Octubre de Barcelona.
Josep Maria Subirachs fue nombrado Officier dans l’Ordre des Arts et des Lettres de Francia. Académico de Bellas Artes desde 1989, algunos de los premios que recibió son la Creu de Sant Jordi de la Generalitat de Catalunya, la Medalla de Honor de la Real Academia de Bellas Artes de Santa Isabel de Hungría, la Medalla de la Universitat Autònoma de Barcelona (UAB) y la Medalla de Oro del Fondo Internacional de Pintura de Barcelona.