El libro, editado por La Oficina de Arte y Ediciones, recoge en gran medida el trabajo de la artista en los años ochenta, centrado en los “lugares de la materia”, incluyendo también algunos trabajos más recientes acerca de los cursos fluviales.
La publicación (bilingüe) propone un recorrido por los sitios más relevantes de la extracción de metales de la península ibérica, como Riotinto, Rodalquilar, Las Médulas y Almadén, los lugares de extracción de la piedra (Menorca), de la sal (Torrevieja) y las obras de distribución del agua potable (Canal de Isabel II).
Dibuja, así, todo un “teatro de la materia” que se desarrolla a la sombra de la atención generalizada y en el ángulo ciego de la visibilidad canónica, con casi nula presencia en la consciencia colectiva. Se trata de un ensayo que, apoyándose sobre los nuevos paradigmas de la ciencia, apunta hacia el desmantelamiento del mito del espíritu vencedor de la materia y somete a examen el culto al genio, que tiene como uno de sus rasgos sobresalientes la exaltación de los monumentos.
Al servicio de la dominación
Para Lootz no se trata de menospreciar los monumentos heredados, sino de superar la inercia de los esquemas anquilosados que enfrentan naturaleza y cultura, materia y espíritu, idea y cuerpo, progreso y barbarie, tan arraigados aún en la opinión de la mayoría. Tampoco se trata de renunciar a las figuras básicas que posibilitan el funcionamiento de la mente como son oposición, delimitación, exclusión y dualidad, sino de poner al descubierto el procedimiento por el cual estas figuras se convierten en herramientas al servicio de la dominación, el sometimiento y la explotación de buena parte de la humanidad.
El libro presenta también una amplia documentación gráfica de los lugares mencionados e incluye textos de Chantal Maillard, Esther Moñivas, César Lanza y la propia artista.