Ahora, la Biblioteca PHotoBolsillo de Fotógrafos Africanos dedica su segundo volumen –el primero lo protagonizó el angoleño Jean Deparaa– a Fosso, un fotógrafo camerunés que se disfraza y carateriza para autorretratarse con distintas significaciones. En las 59 fotografías que recoge PHotoBolsillo podemos ver la evolución del trabajo del artista desde lo más personal hasta lo más político y social.
Fosso comenzó su relación con la fotografía en los años 70, cuando trabajaba en un estudio fotográfico encendiendo y apagando las luces de los focos en Bangui, en la República Centroafricana. Cuando el estudio se cerraba al público, él se autorretrataba vestido con atuendos como los de las estrellas de la música y el cine que salían en las revistas. A partir de ese momento comienza a tomar conciencia de lo que puede expresar con su cuerpo. Él es la materia prima que, disfrazado y caracterizado, puede tranformarse para contar distintos sentimientos y emociones.
Las series El sueño de mi abuelo y Memoria de un amigo, aunque de épocas distintas, revelan matices autobiográficos del propio autor. Fosso se desdobla y vive sus propias creaciones. Pero va evolucionando y pasa de lo más personal a lo social. Comienza entonces su compromiso histórico que se refleja en su trabajo más reciente: African Spirits (Espíritus Africanos), donde se caracteriza como Malcom X, Martin Luther King, Mohamed Ali o Angela Davis. Con estos autorretratos, crea representaciones icónicas y remite a los sueños panafricanistas.
La Biblioteca PHotoBolsillo [1] ha dedicado más de 70 títulos a fotógrafos españoles. Diez años después, y gracias a la colaboración de la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo, presenta la obra de autores de América Latina y África.