Tal como recoge la Ley 1/2015, de 24 de marzo, reguladora de la BNE, el ministro informará de la candidatura seleccionada al Pleno del Real Patronato, que se reunirá en las próximas semanas. Posteriormente se llevará al Consejo de Ministros para su aprobación.
El proceso de renovación se inició el pasado 3 de mayo cuando la actual directora informó a dicho Pleno de su intención de jubilarse. El Ministerio publicó el 31 de mayo la Orden [1] que convocaba y regulaba el proceso de selección de la nueva dirección, que se abrió una vez publicada la resolución con las bases de la convocatoria.
Tal como queda recogido en el estatuto del organismo, se ha acudido “a un sistema de preselección que garantice la publicidad y concurrencia, y que asegure la participación del Real Patronato, con el asesoramiento de profesionales del ámbito bibliotecario y documental. Su designación atenderá a los principios de mérito, capacidad e idoneidad”.
Ana Santos ha sido directora de la Biblioteca desde 2013, donde ya había trabajado cuatro años como directora de Acción Cultural. Durante este mandato de más de diez años ha sido el motor del cambio que ha permitido convertirla en un referente internacional en la protección del patrimonio bibliográfico y documental, en la digitalización y aplicación de las nuevas tecnologías en el ámbito bibliotecario y en el acercamiento a los investigadores y a la ciudadanía.
En cuanto a Óscar Arroyo, es graduado en Información y Documentación por la Universitat Oberta de Catalunya (2020) y diplomado universitario en Biblioteconomía y Documentación por la Universidad Complutense de Madrid (1996). Funcionario de carrera en activo de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, perteneciente al Cuerpo Superior de Archivos, Bibliotecas y Museos (en la especialidad de Bibliotecas), ha sido jefe de Servicio del Libro, Archivos y Bibliotecas de la Consejería de Educación, Cultura y Deportes desde 2011. Previamente, también en la administración castellanomanchega, fue asesor del Libro y Bibliotecas, entre 2007 y 2011; jefe de Sección de Coordinación Bibliotecaria, de 2000 a 2007; y técnico auxiliar de Archivos y Bibliotecas en la Biblioteca de Castilla-La Mancha (Biblioteca Pública del Estado en Toledo), desde 1998 a 2000.
Entre las funciones y competencias asumidas en sus distintos cargos se encuentran la planificación, responsabilidad técnica e impulso de la Red de Bibliotecas Públicas de la región (con más de 450 bibliotecas públicas) y la Red de Bibliotecas Móviles; la coordinación de la Biblioteca de Castilla-La Mancha, las cinco Bibliotecas Públicas del Estado y los cinco Archivos Históricos Provinciales; la redacción de borradores de normas legales en materia de bibliotecas, archivos históricos y depósito legal; además de ser responsable del Catálogo Colectivo de Patrimonio Bibliográfico, así como de la Biblioteca Digital y el Repositorio de Patrimonio Cultural de dicha comunidad, que integra el Archivo de la Imagen y el Archivo de la Palabra.
A lo largo de su trayectoria ha publicado estudios, informes, comunicaciones y artículos relacionados con la planificación y gestión bibliotecaria, legislación de bibliotecas, bibliotecas móviles y bibliotecas en el medio rural. Destaca, entre ellos, el estudio ‘Universalizar los servicios bibliotecarios públicos en España [2]’ (FESABID, 2021), que presentó en el Senado en abril de 2022.