Cien capítulos: uno por motivo. Cien motivos: cien emociones a flor de piel. En la primera se habla del origen de la «furia española», un concepto que trasvasa lo deportivo y se instala en el ideario nacional desde los Juegos Olímpicos de Amberes (1920), cuando en el tercer partido de la competición, el 1 de septiembre frente a Suecia, Belauste entró en la portería rival acompañado del balón tras dejar su advertencia en el aire: «A mí el pelotón, que los arrollo».
Estilo
El que remata el centenar de motivos habla de el «reto de la excelencia», para concluir que independientemente del resultado de España en el Mundial de Brasil, la selección está ya para siempre en el grupo de los escogidos por la historia.
«El equipo español ha encontrado su estilo, el famoso tiki-taka, el juego de toque, velocidad, pase y creatividad. Mientras no renuncie a esa esencia, a su identidad, los aficionados tenemos no cien, sino innumerables motivos para animar a La Roja, ahora y siempre».
Entre el primero y el último, doscientas y pico páginas que, al margen de que se tenga o no en el fútbol razón de vida, se leen de tirón. 100 motivos para animar a La Roja es un libro ameno y muy bien escrito, en el que se mezclan pasado y presente; historia y vida.
Recuerda el autor que la selección española de fútbol nos ha dado desde 2008 innumerables excusas para seguirla y disfrutar con sus éxitos. Estamos en un período de triunfos, pero no siempre fue así. En el casi siglo de vida del combinado español se alternan algunos fracasos con triunfos incipientes, grandes partidos, casos sonoros de mala suerte, récords reseñables y muchas anécdotas y curiosidades. Un repaso a esa trayectoria, que recorre de punta a punta la historia del fútbol en nuestro país.
Claro que hay más motivos para hacerlo pero, lo dicho, cien son más que suficientes. Sumérjanse en la lectura. Den rienda suelta a la emoción y, por supuesto, afinen las gargantas.
El autor
Daniel Gil (Sevilla, 1973) es periodista, licenciado en Derecho por la Universidad Pontifica Comillas y máster en periodismo por la Universidad Autónoma de Madrid-El País. Ha trabajado en la delegación de El País en Sevilla; en el diario 20 minutos, en Sevilla y Madrid; y en el Departamento de Comunicación del Ministerio de Sanidad. Desde 2010 lo hace en el Departamento de Comunicación de Farmaindustria. Criado en la capital hispalense, sede durante años de los partidos de la selección española y máximo exponente del «jugador número 12», disfruta y luce ahora con orgullo los éxitos futbolísticos de España tras años de frustración en cuartos de final y eliminaciones en primera fase. яндекс [1]