La presentación en la Feria del Libro de Madrid del nuevo sello fue todo un alegato en favor de un género estigmatizado, en palabras del escritor Juan Jacinto Muñoz Rengel, quien habló del «estigma que todavía pesa sobre el género fantástico, menospreciado por la crítica y la academia que siempre han privilegiado la tradición realista». A lo que añadió que «los lectores tienen menos complejos».
Al acto de presentación de Fantascy acudieron también alguno de los primeros autores que han publicado bajo este sello. Concepción Perea, autora de La Corte de los Espejos, destacó la incorporación de la mujer al género: «Ya no se puede hablar solo de Elia Barceló. Desde hace tiempo otros nombres femeninos están cultivando el género, así, por ejemplo, Montse de Paz o Laura Gallego».
Primeros títulos
La puesta de largo de Fantascy en el mercado editorial ha contado con el lanzamiento de varios títulos. Además de La Corte de los Espejos ha publicado Embassytown, de China Miéville, y La bomba número seis y otros relatos, de Paolo Bacigalupi.
La idea es editar una media de quince o veinte títulos al año que incluirán obras de Terry Pratchett, Trudi Canavan y Brent Weeks, pero también autores menos conocidos como Jesús Cañadas y G. Willow Wilson, por ejemplo. Además, desde Fantascy han señalado que la publicación de los libros se hará de manera simultánea en papel y en formato electrónico.
Fantascy, según sus editores
“La fantasía se ha vuelto imprescindible. Como género de entretenimiento y como fenómeno popular ha dejado de ser un ‘boom’ para convertirse en una de las influencias más consolidadas del siglo XXI: películas, series de televisión, videoclips, videojuegos… Y literatura, literatura para todos los públicos y para los nuevos aficionados, para los veteranos y para las nuevas generaciones nacidas al amparo de grandes autores convertidos en superventas: J. R. R. Tolkien, J. K. Rowling, Stephenie Meyer, Patrick Rothfuss, George R. R. Martin… En España, donde el interés por el género fantástico ha empezado también a emerger con fuerza gracias a autores como Félix J. Palma, Laura Gallego o J. J. Muñoz Rengel, la mayoría de títulos surgían hasta hace poco en sellos especializados o editoriales generalistas. Por primera vez, Fantascy reunirá ambas líneas y ofrecerá un catálogo que aspira a ser la referencia de muchos tipos distintos de lectores, del ‘fandom’ o mundillo del fantástico al ‘mainstream’ formado por lectores que disfruta del género sin buscarlo. Al fin y al cabo, la realidad se ha vuelto tan variable que a menudo son los lectores de fantasía los más preparados para revisarla. Soñamos otros pasados, cuestionamos el presente, reinventamos el futuro. Exploramos universos, seguimos a héroes ignotos, descubrimos objetos, hábitos y criaturas. Y todo ello porque está en nuestra naturaleza imaginar. Porque no podemos aceptar una lectura única del mundo. Porque sabemos que hay otras formas de existir.