Como puntualizan los propios autores, se trata de un libro en el que la fotografía y la palabra se muestran como aspectos complementarios (materia y energía, cuerpo y espíritu) de una sola realidad que es el paisaje de la Axarquía almeriense.
«El viaje implica movimiento –prosiguen–, pero también cambio: un hombre sale de viaje y es otro el que regresa o ya no vuelve… Existen muchos tipos de viajes, pero todos tienen en común compartir la experiencia transformadora, el reto de enfrentarse a una experiencia vital que permite abrir la puerta a lo desconocido, salir del propio mundo e ir hasta los confines de la imaginación. Se puede viajar hacia uno mismo o hacia el otro. El viaje es apertura y observación, es relación y aprendizaje».
La mirada fotográfica de Domingo Leiva y la prosa descriptiva, poéticamente esclarecedora, de José González Núñez hacen que nos sintamos «parte de…» aquello que se nos muestra asumiendo que, como los autores también sugieren, el paisaje implica la existencia de un sujeto observador y de un sujeto observado… pues el paisaje es el ámbito de las vidas.
El ámbito de las vidas
Al adentrarnos en estas páginas, que es hacerlo en pueblos y playas, cuevas y pozos, montes y amaneceres y arrecifes e isletas y aromas y personajes y… hacemos nuestro todo ese entorno de vida.
Si nunca estuvimos en Pulpí o en Cuevas de Almanzora, en Mojácar o en Turre, en Los Gallardos o Huercal-Overa, en Lubrín, Campos de Níjar, Sorbas o Lucainena… si nunca pusimos el pie y el ojo en aquellas luces, percibiremos un deseo casi irrefrenable de emprender este particular viaje en el que están contenidos otros muchos. Pero si somos de los afortunados que alguna vez visitaron aquellos lugares nos sentiremos reconfortados en el recuerdo y extasiados ante esta forma de ver, sentir e interpretar lo ya conocido.
«Cuenta tu aldea y contarás el mundo». Este proverbio chino con el que el libro se abre alberga el espíritu que gravita sobre toda la obra que, como queda dicho, atesora la grandeza de lo sencillo o, si se prefiere, el espíritu sin alharacas de lo que realmente es grande.
¡Déjese llevar! Como dijo el pensador, “viajar no es llegar sino estar yendo”, y esta andadura es gratificante y reveladora, emotiva; deslumbrante.
Viaje al Levante almeriense. La Axarquía, otras poesibilidades
José González Núñez
Fotografías de Domingo Leiva Nicolás
Realización: Kos
Arráez Editores
205 p