Aprovechando el quincuagésimo aniversario del estreno de El Padrino, Javier Márquez Sánchez publica Uno de los vuestros (que edita Muddy Waters Books) [1], un tratado sobre la mafia italoamericana durante el siglo XX. Resulta complicado, cuando no imposible, encontrar algo nuevo sobre esta centenaria organización criminal, especialmente con la ingente cantidad de información a disposición de cualquiera (como el apasionante Cosa Nostra de John Dickie), pero Uno de los vuestros, lejos de sobrar, es un acierto en toda su extensión. A diferencia de la obra de Dickie (que es café para los muy cafeteros), será una lectura muy amena para los no iniciados y un gran compendio histórico-cultural para los amantes de los wise guys. Ese es el gran acierto de Márquez: aglutinar en torno a una sola obra todo lo relacionado con la mafia en Estados Unidos: su historia, pero también su iconografía y su repercusión sociocultural; realidad y ficción, aunque a veces la frontera entre ambos mundos sea irreconocible.
Porque, si bien aborda sucintamente el origen de la organización en el Viejo Continente, el libro de Márquez se centra, casi en exclusiva, en la mafia del otro lado del charco (también conocida allí como The Mob) y en cómo los italianos expatriados, primero, y los italoamericanos, después, adaptaron las prácticas de la Cosa Nostra siciliana a los condicionantes de la «tierra de la libertad», creando así su particular sueño americano de violencia y negocios turbios.
En Uno de los vuestros las historias de los más famosos capos italoamericanos engarzan con certera precisión con su reflejo en la cultura popular a través del cine y las series, la literatura, la música, la gastronomía o la ciencia empresarial (las técnicas y organización de la mafia se han estudiado en escuelas de empresa e incluso un exmafioso, Louis Ferrante, publicó con poco sonrojo un libro en el que prometía a las corporaciones alcanzar el éxito a través del aprendizaje de sus métodos).
Por la obra de Márquez desfilan gánsteres bien conocidos por todos (como Al Capone, Lucky Luciano o John Gotti) y sus alter ego en la pantalla (como Vito Corleone o Tony Soprano). También lo hacen personajes clave del último siglo, tales como políticos (los Kennedy), la curia (escalofríos provoca el oscurísimo arzobispo Marcinkus), empresarios y banqueros (como Roberto Calvi, ajusticiado en el puente de Blackfriars de Londres), músicos (Frank Sinatra, Dean Martin o Enrico Caruso) o actores y directores (Al Pacino, Marlon Brando, Francis Ford Coppola, David Chase, James Cagney o Marilyn Monroe); todos ellos que, ya sea por su aportación cultural o por su vinculación directa o indirecta con la mafia, han contribuido de forma determinante a la popularización y mitificación de esta organización, especialmente en la segunda mitad del siglo XX.
Aunque la mafia gozaba con anterioridad de un discreto encanto entre la sociedad estadounidense (por ejemplo, no olvidemos que a la pandilla de Elvis se la denominaba la Memphis Mafia), la Cosa Nostra vivió su esplendor como fenómeno cultural mundial a partir de la publicación en 1969 de la novela de Mario Puzo The Godfather, que tres años después dio pie a su homónima adaptación cinematográfica, que ocupa un lugar prioritario en los anales del séptimo arte y que sentó las bases de toda la iconografía audiovisual mafiosa. Desde entonces, la producción sociocultural sobre esta organización no ha hecho más que crecer, llegando a su cenit bien entrado este siglo con la serie Los Soprano, considerada por muchos como la mejor de la historia.
Con todos estos ingredientes (realidad y ficción, historia y leyenda, asesinatos y cultura popular, asco y fascinación), Márquez concina con habilidad y soltura una obra, que adereza con un ácido y delicioso sentido del humor al más puro estilo salsa pomodoro, convirtiendo Uno de los vuestros en un plato –de pasta, cómo no– de altura y para todos los públicos.