La colección incluye obras de artistas contemporáneos como Damien Hirst, Takashi Murakami, Richard Prince, Liu Ye, Mark Grotjahn, Neo Rauch, John Currin, Do Ho Suh, John Baldessari, Gerhard Richter o Félix Gonzalez-Torres, entre otros, y está valorada en más de 10 millones de dólares (8,3 millones de euros).
Los ingresos que genere la venta de esa colección, formada por trabajos figurativos, abstractos, minimalistas o conceptuales, servirá para pagar a los acreedores de ese banco, cuya quiebra provocó en el mundo una de las peores crisis financieras desde la Gran Depresión.