La primera escultura, Stairway to Heaven (Escalera al cielo), expuesta en ARCO por la Galería ADN de Barcelona, consiste en un árabe rezando agachado, encima de él y arrodillado, un sacerdote católico; y sobre éste, un rabino. La otra pieza tiene como base una metralleta Uzi que sostiene un candelabro hebreo de siete brazos (denominado menorá).
Dios, al final de la torre
A modo de explicación de la primera obra, el artista indicó que "la finalidad es Dios; es una torre, tienen sus respectivos libros religiosos intercambiados entre sí, y todos aceptan la religión de los demás". La obra ha sido comprada por una coleccionista belga que pagó por ella 50.000 euros.
En relación a la pieza del candelabro, el artista ha señalado: "quería unir dos elementos de simbología israelí. Me basé en una obra de Philippe Starck en la que sobre un fusil AK-47 situó un candelabro".
Mera provocación
La Embajada afirmó en un comunicado oficial que "valores como la libertad de expresión o la libertad artística sirven en ocasiones de simple disfraz de prejuicios, de estereotipos o de la mera provocación por la provocación. Un mensaje ofensivo no deja de ser hiriente por pretender ser una obra artística. Consideramos que éste es uno de estos casos, y lo manifestamos siendo conscientes de que este tipo de provocaciones tiene éxito, precisamente, porque el sentido común no puede dejarlas sin respuesta".
En otra de sus obras, Eugenio Merino [1] representó en ARCO 2009 el suicidio de Damien Hirst y en 2008 a Fidel Castro como un zombie. "Ni Fidel Castro ni Hirst se molestaron ni protestaron por las obras anteriores", recordó Merino. Estas esculturas están realizadas en resina, silicona y pelo humano.
ARCOmadrid_2010. Feria Internacional de Arte Contemporáneo [2].
Del 17 al 21 de febrero de 2010. Abierta al público a partir del 19 de febrero.