Sokolov es también famoso por lo que no hace: ya no toca con orquestas, ni con pianos construidos hace más de cinco años. No realiza grabaciones en estudio y se muestra reacio a conceder entrevistas, ya que se siente más cómodo expresándose por medio de su música.

En una búsqueda inflexible de excelencia artística, siempre exige al menos el doble del tiempo de ensayo que se espera de su colegas antes de cualquier recital y, como si se tratara de dar algo a cambio, ofrece el doble de propinas. En resumen, su búsqueda de la perfección lo invade todo.

Mozart y Chopin

Su primer disco para el Sello Amarillo, un recital de obras de Mozart y Chopin grabado en directo en el Festival de Salzburgo de 2008, se publicará en enero de 2015. Será su primer disco en veinte años, desde el dedicado a las Sonatas de Schubert, grabado en 1992 y publicado cuatro años más tarde.

El adolescente Sokolov atrajo por primera vez la atención global tras su sensacional triunfo en el Concurso Internacional Chaikovski de Moscú en 1966. Desde entonces ha cautivado a los amantes del piano de todo el mundo con interpretaciones de una nobleza excepcional y de la máxima individualidad y reflexión.

Los muy demandados recitales de Sokolov siguen siendo únicos. Interpreta el mismo programa en hasta setenta conciertos en un año, modificando una mitad en enero y la otra en octubre. Una de sus especialidades es ofrecer un gran número de propinas, que son siempre esperadas por la legión de devotos seguidores de sus conciertos.

El más grande

Mark Wilkinson, presidente de Deutsche Grammophon, ha declarado: “La espera, por fin, ha terminado, y damos calurosamente la bienvenida al maestro Sokolov al Sello Amarillo al tiempo que anunciamos la publicación de un disco nuevo e infrecuente. Inspira una devoción absoluta a su extraordinaria legión de admiradores, muchos de los cuales se proponen asistir a todos y cada uno de sus extraordinarios conciertos, a pesar de lo cual es una “antiestrella” por antonomasia. Los críticos y los pianófilos han sabido de su trabajo desde hace muchos años y ahora queremos conectar a la audiencia más amplia posible con este artista enigmático, revitalizador espiritualmente y revelador de lo desconocido”

“Muchos lo consideran, sencillamente, el más grande pianista vivo”, observaba The Independent, mientras las Salzburger Nachrichten decía de él recientemente: “la manera de tocar el piano de Grigory Sokolov se expande continuamente hacia una dimensión intergaláctica; hace mucho que se convirtió en un universo dentro de sí mismo”.