Un vals peruano escrito por dos argentinos e inmortalizado en la garganta de una española, madrileña para más señas, que nos ha dejado hace unos días. Eso es Amarraditos, uno de los temas fetiche de María Dolores Pradera, cuyo donaire en la gestualidad y el fraseo la convertían en la mejor intérprete posible para este tema con música de Pedro Belisario y letra de Consuelo Durán. Ambos quisieron, en este clásico de la música popular latinoamericana, celebrar las costumbres que la clase alta limeña había tomado a finales del XIX de la aristocracia europea y la España colonial; un canto a las prendas y maneras que ya “no se estilan”, al refinamiento que había quedado deliciosamente viejuno.
La versión de María Dolores Pradera respiraba finura y distinción en grado máximo en el año 1966 cuando la grabó acompañada de Los Gemelos y lo sigue haciendo ahora, más de medio siglo después, cuando ha vuelto a sonar en radios y televisiones a raíz de su fallecimiento. Porque como dice la canción elegida, ella misma fue siempre también una señora de “aquellas que vieron mis abuelas”. Todo elegancia.
https://youtu.be/qcxX1-7efNg