Así, la programación contará con un único estreno mundial (El Público, de Mauricio Sotelo) en vez de dos, y La ciudad de las mentiras, de Elena Mendoza, producción prevista para julio de 2015, tendrá que esperar para ver la luz a la temporada 2016-2017 por problemas presupuestarios.

Además, la apuesta de La fura dels Baus se cae y su Fidelio de Ludwing van Beethoven será sustituido por una produción del Palau de les Arts Reina Sofía (Valencia) con dirección de escena, escenografía y figurines de Pier Luigi Pier’Alli.

El cambio, según la propia institución, se debe a que «la compañía estaba sobrecargada de trabajo» y a «un acuerdo con el Palau» por el cual el coliseo valenciano acogerá la producción de Luisa Fernanda que el Real estrenó en 2006, y el teatro madrileño el Fidelio valenciano del mismo año.

Más cambios

Goyescas, de Enrique Granados, prevista para junio en programa doble bajo la dirección musical de Plácido Domingo, se realizará finalmente en versión concierto, también debido a recortes. Por su parte, la segunda parte del programa, Gianni Schicchi, de Giacomo Puccini, sí contará con la escenografía de Woody Allen, del que todavía el Real no ha confirmado su visita a Madrid.

También se ha sustituido la producción propia prevista del Hänsel und Gretel de Engelbert Humperdinck por la alquilada al Festival de Glyndebourne, de 2013, con dirección y figurines de Laurent Pelly.

Por su parte, la soprano francesa Natalie Dessay no pasará finalmente por Madrid en octubre para interpretar La fille du régiment de Donizetti. «Está en proceso de retirada de la ópera. Cuando se planteó la temporada dijo que iba a hacer una excepción, pero ha dado marcha atrás y finalmente no ha podido ser», ha señalado Joan Matabosh.

Venta de abonos

Sin embargo, a pesar de todos estos recortes y cambios, la dirección del Teatro ha insistido en remarcar la «estabilidad y la buena salud» de la institución, ya que «la temporada que ahora se inicia se puso en marcha en unas circunstancias muy especiales debido a la enfermedad de Gerard Mortier, el anterior director artístico; la llegada de Joan Matabosch y el doble equipo que estuvo trabajando conjuntamente varios meses», ha remarcado el presidente del Real. Para Marañón, cerrar la programación en solo tres meses ha conllevado esta serie de «ajustes» y, en realidad, la temporada comienza con excelentes noticias como la incorporación de Pablo Heras-Casado como director principal invitado o el aumento significativo en la venta de abonos.

Estas ventas, que empezaron a caer por la crisis a partir de la temporada 2008-09, suben por primera vez desde entonces en un 12,8%. En concreto, «los abonos de ópera se han incrementado casi un 13% y los de danza casi un 14%», según las cifras ofrecidas por García-Belenguer. «La suma de la venta de abonos conjunta supera la barrera psicológica de los 15.000 y supone unos 1.600 abonos nuevos». También han crecido de manera considerable los abonos reducidos.

En relación a la situación económica del Teatro, Gregorio Marañón ha destacado que «el Teatro Real sale de la crisis sin un euro de endeudamiento».