Una vecina denunció a Laia M. en 2006 porque le molestaba el sonido de su piano, que tocaba cinco días por semana, de 9.00 a 13.00 y de 14.00 a 18.00 horas. Tras la denuncia, responsables del Ayuntamiento de Gerona acudieron en repetidas ocasiones a casa de la joven y le pidieron que insonorizara la habitación del instrumento. Le dieron un plazo de 15 días pero no se produjo la renovación del espacio, según el escrito sw la fiscal del caso.
La denuncia sigue en curso y la Fiscalía ha considerado que el sonido del instrumento superaba «el máximo de inmisión sonora» permitido por ley, por lo que ha solicitado una pena de siete años y medio de cárcel para la pianista, más cuatrode inhabilitación para tocar el instrumento. Además, para sus padres solicita una multa de 10.000 euros y una indemnización de 9.900 por ansiedad y episodios de pánico, ya que a consecuencia de las constantes molesticas del piano, la vecina pidió la baja laboral por lesiones psíquicas.
El juicio se celebrará el próximo 11 de noviembre en la Audiencia de Gerona.