El empresario Julio Muñoz Ramonet, que murió en Suiza en 1991, dispuso en su testamento que dejaba a la ciudad dos fincas de su propiedad, el palacete situado en el número 282 de la calle Muntaner y otro en la calle Avenir 26, incluyendo todo su contenido, que incluía una gran colección de obras de arte. La única condición que puso fue que el Ayuntamiento velara por la preservación, conservación y mantenimiento del legado, razón por la que el consistorio creó en 1995 la fundación privada Julio Muñoz Ramonet. La validez del testamento, que cuestionó la familia del industrial, fue ratificada en varias sentencias desde entonces.
Según el comunicado del ICUB, el pasado 24 de julio, el juzgado de Primera Instancia Número 1 de Barcelona dictó una interlocutoria, notificada a las representaciones de Carmen, Isabel, Alejandra y Helena Muñoz Villalonga y de Culturarte S.A., que acordaba requerir a todas las partes a hacer entrega de los cuadros La aparición de la Virgen del Pilar de Goya y La Anunciación del Greco en el plazo de un mes, siendo el mes de agosto inhábil judicialmente.
Estos cuadros forman parte del legado que Julio Muñoz Ramonet donó en 1991 a la ciudad de Barcelona y que las hijas del empresario y Culturarte S.A. se han negado reiteradamente, según el consistorio, a cumplir, así como a obedecer las diferentes resoluciones judiciales. Por este motivo, la interlocutoria contendía la advertencia, en el caso de no cumplimiento, “de acordar la entrada en lugar cerrado, con auxilio de la fuerza pública si fuera necesario”.
Ayer, 29 de septiembre, acabó el plazo del requerimiento del juzgado para la entrega de los dos cuadros. Por este motivo, la Fundación ha presentado hoy un escrito en el juzgado pidiendo la entrada de una Comisión Judicial en el domicilio de Isabel Muñoz Villalonga, que tiene las obras en calidad de depósito judicial, y tome posesión de ambas para ponerlas a disposición de la Fundación.
Esta actuación se tendrá que llevar a cabo mediante exhorto al Juzgado de Primera Instancia que corresponda de Madrid e incluirá la autorización para proceder a la entrada y de pedir el auxilio de la fuerza pública; así como que, en caso de no encontrarse las dos obras en dicho lugar, por parte del Secretario Judicial se proceda a interrogar a la hija de Julio Muñoz Ramonet, o a las terceras personas que se encontraran en el interior del inmueble, para que manifiesten si estas obras están en su poder y dónde se encuentran, con la advertencia de incurrir en desobediencia.
El escrito también pide que acuerde simultáneamente imponer con carácter solidario a las partes ejecutadas una multa por importe de 100.000 euros por cada mes transcurrido sin la devolución de la obras.