El Gobierno impulsa este nuevo programa de ayudas con la finalidad de revitalizar el sector tras el impacto causado por la pandemia; así como de fomentar la accesibilidad universal y diversificada a la cultura, promoviendo entre los jóvenes hábitos de consumo culturales.
El texto aprobado ha tenido en cuenta las aportaciones recibidas durante el trámite de audiencia e información pública, que tuvo lugar del 4 al 15 de febrero de 2022. En total se incluyeron 30 aportaciones, cuatro de ellas procedentes de comunidades autónomas; y las 26 restantes, de personas físicas y jurídicas. Entre las aceptadas se han incorporado en el texto la relativa a la exención del cómputo del importe de esta ayuda a efectos del cálculo de umbrales de renta y patrimonio familiar; o la que prevé la posibilidad de que los propios editores o autores puedan realizar ventas en línea de sus productos culturales con envío a domicilio. En paralelo al trámite de audiencia, el Ministerio ha ido manteniendo encuentros con representantes del sector cultural, de asociaciones y organizaciones para abordar directamente el desarrollo del Bono.
En la elaboración del texto, Cultura ha seguido la experiencia de otros países como Francia o Italia, que también fijan la edad de sus beneficiarios en los 18 años, al considerar que la mayoría de edad implica, además de la asunción de unos deberes y derechos, la posibilidad de inaugurar una «autonomía» en lo que respecta a sus decisiones también en el ámbito cultural.
Tres sectores distintos
El decreto establece que el gasto se distribuya y diversifique entre tres sectores distintos, con importes máximos por cada uno. Se prevé que el bono subvencione artes en vivo, patrimonio cultural y artes audiovisuales hasta un máximo de 200 euros por beneficiario. Se repartirá entre entradas y abonos para artes escénicas, música en directo, cine, museos, bibliotecas, exposiciones y festivales escénicos, literarios, musicales o audiovisuales. Además se recoge subvencionar productos culturales en soporte físico hasta un máximo de 100 euros: libros; revistas, prensa u otras publicaciones periódicas; videojuegos, partituras musicales, discos, CD, DVD o Blu-ray.
Por su parte, cada persona beneficiaria podrá destinar hasta 100 euros al consumo digital o en línea: suscripciones y alquileres a plataformas musicales, de lectura o audiolectura, o audiovisuales, compra de audiolibros, compra de libros digitales, suscripción para descarga de pódcasts, suscripciones a videojuegos en línea, suscripciones digitales a prensa, revistas u otras publicaciones periódicas. Estas suscripciones estarán limitadas a un máximo de cuatro meses.
No será subvencionable la adquisición de productos de papelería; libros de texto curriculares, ya sean impresos o digitales; equipos, software, hardware y consumibles de informática y electrónica; material artístico; instrumentos musicales; espectáculos deportivos y taurinos; moda y gastronomía. El bono tampoco cubrirá la adquisición de productos que hayan sido calificados como X o pornográficos.
Plataforma propia
El texto recoge que el Bono Cultural Joven será de uso exclusivo en establecimientos o instituciones adheridas al programa que presten servicios en España y que, de forma profesional y habitual, ejerzan actividades de venta o puesta a disposición de productos, actividades y servicios culturales. Especifica que la gestión del programa se realizará a través de una plataforma tecnológica específica para las entidades colaboradoras. Los interesados en adquirir la condición de entidad adherida al Bono Cultural Joven deberán solicitar su adhesión en los términos y plazos que se establezcan en la correspondiente convocatoria.
La gestión del programa se realizará a través de esta plataforma, en la que se presentarán las solicitudes, que se tramitarán por orden de presentación. Una vez concedida la ayuda al beneficiario se abonará el importe total concedido, en un único pago, en formato de tarjeta prepago virtual nominal, que estará identificada con un número y la identidad del beneficiario. Estará vigente durante los 12 meses siguientes a su concesión. Excepcionalmente se podrá emitir una tarjeta física, en caso de que el beneficiario no disponga de dispositivo móvil compatible para contener la mencionada tarjeta virtual.
La futura norma también prevé que el Bono Cultural Joven sea compatible con cualquier otra subvención, ayuda, ingreso o recurso procedente de otras administraciones públicas.