El motivo de esta decisión ha sido las declaraciones realizadas por el artista a la revista Arcadia en las que aseguró no estar contento porque las obra premiadas le han "parecido muy pobres". Además, el pintor y escultor conocido por sus pinturas y esculturas volumétricas también dijo que se había traído un jurado internacional que premiaba "obras que eran lamentables" y que a su juicio "había otras mejores en los salones. Se dieron los premios muy mal dados".
Para la Fundación que otorgaba estos premios, las declaraciones de Botero causaron extrañeza ya que él tenía claro que apoyaba un certamen de arte contemporáneo, algo que en muchas ocasiones resulta muy distinto a los gustos personales del pintor y escultor. La directora aseguró que "tras leer esas declaraciones tan tajantes sobre el arte joven en Colombia decidimos que era imposible hacer el último premio que él quería hacer. No vale la pena".