Nacido en Beavais (Francia) en 1927, Hubert Taffin de Givenchy estudió en la Escuela de Bellas Artes de París y empezó en la moda en las casas de Lucien Lelong, Piguet, Jacques Fath y Elsa Schiaparelli hasta que abrió su propia firma con el apoyo del español Cristóbal Balenciaga. En los años 50 realizó trajes para la actriz Audrey Hepburn que ejercieron una gran influencia y en los que todavía se inspiran muchos diseñadores. Otras clientas famosas fueron las actrices Liz Taylor y Jean Seberg. En 1988 vendió la firma, pero siguió dirigiéndola hasta 1996, año en que se retiró.
La admiración de Givenchy por la figura de Cristóbal Balenciaga impulsó el proyecto de construcción de un museo dedicado a la obra del genial modisto vasco y la constitución de la Fundación Cristóbal Balenciaga, de la que es presidente fundador. Su compromiso con el museo le llevó a donar su colección particular de ‘balenciagas’ a la entidad. Asimismo, su apoyo ha sido fundamental para la reorientación de la Fundación, de la que hoy forman parte todas las Administraciones involucradas en la puesta en marcha en Getaria del Museo Cristóbal Balenciaga.